Se va cerrando un año super intenso, lleno de eventos; de propuestas nuevas y las de todos los años, de actividades deportivas, sociales, culturales e institucionales y justamente, los juegos que se realizan en Pinamar son una conjunción de todas las actividades en menos de una semana que resumen en cierto punto la cotideaneidad de la Federación.
El deporte siempre presente, en este caso representado por el fútbol, ténis, pádel, Futsal , Macabi Man/Woman, ciclismo, running y golf.
Las propuestas culturales con el habitual y multitudinario rikudim, la vuelta del burako y la innovación con el wellness que fue furor en estos cuatro días.
Las propuestas institucionales tanto para el interior, como para las sociodeportivas en la mesa de dirigentes haciendo un repaso por lo que nos dejó el 2024 y como proyectamos el 2025.

Obviamente, en ese espacio contamos como siempre con la presencia de todas las instituciones con las que trabajamos en conjunto como AMIA, DAIA, OSA, KKL y el apoyo de siempre del Embajador de Israel en Argentina Eyal Sela.
La energía Macabea siempre presente, que la podemos ver en cada momento de risas, abrazos y todos los momentos compartidos que son los que quedan independientemente del resultado y hasta del deporte en el que participan.
Un recital porque nos propusimos volver a bailar y lo hacemos diariamente, celebrando la vida y haciendo vida judía permanentemente.
Generando contenido, porque seguimos educando y en este evento lo trabajamos a través de una ceremonia de apertura, concientizando y recordando todo lo que sucede en nuestra comunidad en distintas partes del mundo, porque para que podamos seguir haciendo todo lo mencionado anteriormente, tenemos que básicamente seguir existiendo como pueblo.
Agradecemos a cada uno/a de los participantes, al DAC, a la Municipalidad de Pinamar, a la policía, a nuestro enorme equipo de profesionales que lo viven como voluntarios y a los voluntarios que trabajan como profesionales, a la misma estructura de cada institución y al trabajo conjunto con el fin de que todos vuelvan y empiecen a tachar los días esperando la próxima edición.
Estamos orgullosos y felices, ¡hasta la próxima!