Agencia AJN.- El rector de la Universidad de Haifa, Gustavo Mesch, dio detalles de cómo se preparan para el inicio del primer semestre del año en el marco de las restricciones dispuestas por el COVID-19 y anticipó que en principio habrá un porcentaje reducido de clases presenciales y un 80 por ciento será a distancia.
En una entrevista con la Agencia de Noticias AJN, Mesch explicó las consecuencia de la pandemia, los efectos que generó en la economía y los cambios que produjo en el ritmo cotidiano de la universidad y de la misma ciudad de Haifa, que tiene uno de los índices más bajo de contagios en Israel.
A continuación los tramos más destacados de la entrevista a Gustavo Mesch:
-AJN: ¿Cómo describe la situación en la Universidad y cómo se preparan para el inicio de las clases?
-GM: Hemos pasado dos fases muy importantes y ahora estamos en la tercera fase de la coronavirus. La primera fase fue cuando se declaró el aislamiento social en Israel, que fue –si no me equivoco– el 11 de marzo, y a partir de ese momento, en un periodo muy corto tuvimos que pasar todas las clases de la Universidad a distancia, en una organización logística muy fuerte tanto en el campo tecnológico y de la unidad nuestra de Educación a Distancia, que era muy pequeña y tenía de pronto que enfrentarse con toda la universidad. Implementamos un proyecto muy rápido, muy intenso pero muy exitoso, en el sentido que en pocos días, en dos o tres días pudimos pasar todas las clases a distancia. En la época de los exámenes estábamos todavía bajo una regulación del Consejo Nacional de Educación que en realidad permitió nada más que el 10% de los exámenes sean presenciales y el 90% tenían que ser a la distancia, lo cual nos llevó a otra organización tecnológica para poder hacer exámenes en los cuales los estudiantes fueron controlados a través del zoom, es decir, los estudiantes hicieron los exámenes en sus casa, todos a la misma hora. Para eso tuvimos que implementar también un sistema tecnológico de identificación de los estudiantes, que fue un desarrollo propio que se hizo en menos de una semana con la foto de los estudiantes y la identificación era visual; fotos que teníamos de cada estudiante en la base de datos nuestras y la pantalla que nos mostraba al estudiante. Terminamos esa fase y ahora empezamos la fase realmente del primer semestre. Ahora las limitaciones actuales son que de acuerdo a la ordenanza del ministro de Salud Pública no puede haber más de 20 estudiantes en un aula y tienen que estar a distancia de dos metros, y tienen que estar con máscara. Lo cual nos crea un problema, lo estamos definiendo ahora. Las clases van a ser híbridas, es decir, van a ser dictadas simultáneamente en un aula y a distancia. Como hay clases de 100 alumnos, 80 estudiantes van a estudiar a distancia, en sus casas. Tampoco tenemos aulas suficientes para todos los estudiantes, así que lo que probablemente vamos a decidir es traer al primer año de los estudios de pregrado y parte de los estudiantes de grado. Los estudiantes de pregrado van a venir en forma rotativa, es decir, 20 por semana, cada estudiante va a tener clase presencial durante el semestre, 2 ó 3 clases presenciales y 11 clases a distancia, lo cual nos ha llevado a implementar un proceso ahora, de adaptar en muy poco tiempo muchas aulas nuestras para que puedan grabar las clases y trasmitirlas al mismo tiempo a los estudiantes. Es toda una operación tecnológica bastante complicada, mientras tanto los profesores han recibido indicación que tienen que preparar el curso de forma que sea adaptado a la distancia y hemos instruido a los profesores cómo hacer esas clases, cómo planificarlas, cómo estructurarlas y cómo pasar los temas a las clases en zoom. Las clases nuestras, por lo general, son de 4 horas con un recreo en el medio de media hora, esas son las clases presenciales, pero las clases en zoom no dan para cuatro horas la concentración del estudiante, así que la vamos a tener que dividir en sesiones de una hora máxima con recreos de 10 minutos y después continuamos. La situación de la epidemia es que todavía hay un número alto de contagiados y las restricciones son todavía grandes en término de cuantas personas pueden estar concentradas al mismo tiempo en el mismo lugar. Aparte como hay estudiantes que no tienen acceso tecnológico estamos en la Universidad creando espacios donde pueden llegar y tienen conexión buena a wifi y tomar la clase no en el aula sino en esos espacios que son por lo general los pasillos, que son amplios. Estamos usando los pasillos y adaptando para que sean espacios de estudio donde los estudiantes se pueden sentar con la computadora y tener buena recepción de la clase que se está dictando en el aula con una limitación de 20 estudiantes. Es toda una revolución pedagógica porque los profesores están pasando cursos y talleres de capacitación, de cómo transformar las clases presenciales en clases a distancia y al mismo tiempo toda la logística que implica desde el punto de vista de repartir las aulas, definir que cursos van a ser presenciales y cuáles no. Los únicos que estamos seguros que van a ser presenciales son los cursos que se den en los laboratorios, que también va a haber que dividir a los grupos en dos o tres, y los cursos que son talleres de campo.
-AJN: ¿Para cuándo estaría previsto el inicio del semestre?
-GM: El semestre tiene que empezar en Israel después de las fiestas judías, es decir estamos hablando alrededor de a fines de octubre. La fiestas empiezan el 18 de septiembre a la noche y llevan casi un mes, así que a mediados de octubre van a empezar las clases.
-AJN: ¿Cuál es la reacción de docentes y alumnos frente a estas medidas?
-GM: Yo he instituido una mesa permanente de conversación con los estudiantes, es decir, todas las decisiones universitarias antes de ser tomadas las llevamos a la mesa con los estudiantes, debatimos y cuando hay diferencias tratamos de encontrar, digamos, el denominador común. Así hemos solucionado muchos conflictos de esa forma. Los estudiantes son parte de este proceso, los hemos integrado desde el primer día con la conciencia de que en una época tan difícil tanto para los estudiantes como para nosotros. Con respecto a los docentes también se han adaptado porque en definitiva no es algo que la dirección de la Universidad decidió en forma unilateral por cuestiones económicas, sino que estamos todos bajo las mismas restricciones nacionales, que nos obligan a todos adaptarnos para poder continuar recibiendo remuneración mensual. Con toda la dificultad, yo creo que gran parte de adaptación esa es posible porque hemos puesto un equipo de apoyo técnico y pedagógico muy grande a los profesores, y los profesores sienten que cuando tienen un problema, una duda, un inconveniente, esas dudas e inconvenientes son tratadas inmediatamente, hasta el punto que tienen un respeto muy, pero muy alto por el equipo de la unidad de Enseñanza a Distancia y de la unidad de Ciencias de Computación que apoya todo este proceso. El proceso se da porque hay diálogo constante y porque hay buena voluntad de todas las partes, entendiendo que es una situación de crisis que tenemos que enfrentar, con muchas vicisitudes, con muchas dudas porque en realidad todo está planificado, teniendo en cuenta que las restricciones actuales no van a cambiar. Pero digamos que cuando lleguemos a octubre, que acá empieza el invierno, pensando en la conjunción de la corona con las posibilidades de gripe y puede ser que todavía las restricciones sean más altas y terminemos al final dando de nuevo un semestre completamente a distancia, sin presencial en absoluto.
-AJN: En lo económico, ¿cómo los afecto la pandemia?
-GM: La universidad en Israel son todas universidades públicas. El presupuesto es el presupuesto del Gobierno, y el Gobierno mientras tanto ha demostrado interés en continuar, va a hacer todo el esfuerzo posible para continuar las clases. Así que todavía no hemos recibido ninguna noticia de que hay reducción del presupuesto universitario. Así que seguimos trabajando con el presupuesto que existe, y el presupuesto que existe nos permite, a pesar de los nuevos gastos, que son grandes, nos permite sobrepasar el momento. Estamos en negociación con el Consejo Nacional de Educación para que haya, incluso, una transferencia especial de fondos para poder continuar las clases a distancia, pero el presupuesto de la Universidad no fue reducido, lo cual nos permite continuar las acciones nuestras. Una cosa que tiene importancia es que parte del presupuesto depende del número de estudiantes que se inscriben, y de forma sorpresiva todas las universidades en Israel, de acuerdo a lo que yo he hablado con otros rectores, han tenido para el año próximo que empieza un aumento de inscripción de estudiantes. En las universidades aumentó de un 10 a un 15%, lo que significa que también los aranceles o los ingresos van a aumentar de un 10 a un 15%. Esto simplemente porque el cielo está cerrado los estudiantes israelíes que siempre antes de empezar los estudios van al exterior por 6 meses ya no viajan, así que aprovechan esos 6 meses que el cielo está cerrado para empezar los estudios.
-AJN: ¿Cómo se resolvió la situación de los estudiantes extranjeros que van a estudiar a Israel?
-GM: En general lo que hemos visto nosotros acá es que el Gobierno, a pedido nuestro, ha autorizado dos mil o tres mil visas para estudiantes extranjeros. Todo depende de las posibilidades que los estudiantes extranjeros tienen de llegar a Israel. No obstante les avisamos a los estudiantes extranjeros que si pueden llegar, entonces van a poder participar de las clases presencial y si no pueden llegar van a participar de las clases a distancia. Ahora esto también plantea un pequeño problema acá en especial, porque los estudiantes extranjeros nuestros vienen de Estados Unidos hasta la China, lo que plantea el problema de la diferencia de horaria. La diferencia de horario son casi 24 horas, lo cual nos tenemos que adaptar a los horarios de ellos y los horarios nuestros, y encontrar un horario en el cual la clase presencial pueda ser también trasmitida a distancia en un horario que sea más o menos aceptable para todos.
-AJN: En la universidad, ¿hubo muchos casos de coronavirus entre los docentes y alumnos?
-GM: No tuvimos muchos casos. Recientemente he pedido las estadísticas de cuantos empleados universitarios anunciaron a la división de Recursos Humanos que están aislados en la casa. Tenemos en total, hoy en día, 25 empleados administrativos aislados en la casa, 2 profesores y a lo mejor 5 alumnos. Es decir que en Haifa por lo menos y repito la palabra Haifa, el porcentaje es muy bajo. Haifa es ciudad que está muy, pero muy atrás de las ciudades que lideran el contagio del corona. La ciudades que lideran el contagio del corona hoy en día son Jerusalem, Bnei Brak, Tel Aviv y nosotros estamos muy, pero muy lejos de ellos.
-AJN: Por último, ¿cómo describe el ritmo de vida de Haifa en en esta situación de pandemia?
-GM: Se nota una caída económica, se nota negocios que están cerrando, se nota departamentos que están en alquiler, porque los estudiantes volvieron a la casa de los padres y dejaron los departamentos, se nota una caída en el movimiento de los shoppings. También en la calle se ve poca gente, no te olvides que parte de eso es también parte del turismo, parte de eso también es el nivel de desocupados a nivel nacional, que las estadísticas más optimistas hablan de alrededor de 600.000 desocupados, así que la vida no es tan normal, se nota el retroceso económico. Pero todavía se puede controlar, es decir no es agobiante, pero se nota el retroceso económico. También hay un poco de miedo de la gente de salir demasiado afuera, así que van al trabajo y vuelven del trabajo. Dentro de la Universidad misma el número de empleados que trabajan en la Universidad es el 60%, el 30% trabaja en la casa, no el 100% está permitido trabajar en la Universidad, así que hay guardias. Por ejemplo mi oficina está dividida en tres y cada tercio de los empleados trabaja en la oficina dos días y el resto en casa.