Itongadol/Agencia AJN (Por Andrea Peyser/New York Post).- Desde los horribles ataques del 7 de octubre de 2023, Hamás y sus simpatizantes en las Naciones Unidas y en los campus universitarios le han mentido al mundo.
Han negado la verdad que Hamás violó a sus prisioneros, inventó atrocidades cometidas por las fuerzas israelíes y negó que Israel tenga derecho a existir.
También inventaron cuántos gazatíes murieron.
Lo sabemos porque Hamás lo admite.
El Ministerio de Salud de la organización terrorista asesina ha reducido silenciosamente el número de muertes de civiles que, según afirma, fueron infligidas por las fuerzas israelíes.
En su lista de muertos de marzo de 2025, 3.400 “víctimas” simplemente desaparecen. Anteriormente figuraban como personas que perecieron en agosto y octubre pasados, pero resulta que Hamás las inventó.
Eso incluye a 1.080 niños que Hamás afirmó que fueron asesinados por Israel, cuando nunca lo fueron.
Por supuesto, los medios de comunicación y los manifestantes repitieron como loros esas cifras sin cuestionarlas. ¿Mostrarán algún remordimiento ahora? ¿Empezarán a tratar las proclamaciones oficiales de las agencias controladas por Hamás como lo que son: propaganda y prevaricaciones?
Por favor. Los idiotas útiles de la Universidad de Columbia seguirán gritando falsamente «genocidio» mientras ignoran a los rehenes retenidos y torturados por Hamás.
La indignación va más allá del número de muertos que Hamas dijo, dijo a Telegraph Andrew Fox, autor de un informe sobre las víctimas gazatíes para la Sociedad Henry Jackson.
“La demografía es lo más importante en todo esto. Hemos escuchado afirmaciones de que alrededor del 70% de los muertos son mujeres y niños, y esas listas, especialmente las más recientes, muestran que eso es un completo disparate”, dijo.
¿La verdad? Alrededor del 72% de los fallecidos eran hombres de entre 13 y 55 años. En otras palabras, probablemente miembros de Hamás.
El informe de la Sociedad Henry Jackson detalla cómo el Ministerio de Salud, un grupo controlado por Hamás, manipuló las cifras.
«Se han descubierto errores graves en las listas de víctimas del ministerio», afirma el informe. «Estos errores incluyen a un joven de 22 años registrado como de 4 años, a uno de 31 años registrado como de 1 año y a varios hombres con nombres masculinos registrados como femeninos, aumentando artificialmente el número de mujeres y niños reportados como muertos.»
«Las listas también incluyen a personas que murieron antes de la guerra y a personas que murieron a causa de ataques de Hamás en lugar de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).»
«Probablemente incluyan las alrededor de 5.000 muertes naturales al año, incluyendo pacientes con cáncer que fueron incluidos por el ministerio para recibir tratamiento hospitalario después de ya haber aparecido en las listas de muertos.»
Israel ha hecho todo lo que pudo para minimizar las muertes de civiles, dando advertencias sobre las áreas a ser evacuadas antes de las acciones militares.
Una y otra vez, la narrativa de Hamás ha sido desacreditada. ¿Recuerdan la explosión del hospital árabe Al-Ahli en los primeros días del contraataque de Israel? Hamás afirmó que 500 personas murieron por una bomba israelí y los medios de comunicación mundiales apresuraron su indignación. Las investigaciones luego descubrieron que el número de muertos era mucho menor y que fueron asesinados por un misil terrorista que funcionó mal.
Entonces, ¿por qué Hamás admite de repente que exageró el número de muertos en Gaza?
Una teoría es que el grupo terrorista, cuyos miembros asesinaron, violaron y secuestraron a más de 1.200 judíos el 7 de octubre de 2023, lucha por mantener su credibilidad en un momento en que los palestinos se están alzando en protesta contra el control de Hamás sobre el territorio.
Miles de personas salieron a la calle en lugares como la Ciudad de Gaza para manifestarse, coreando consignas como: «¡Fuera, fuera, fuera! ¡Hamás, andate!».
Parece que puede sumarse a los propios palestinos a las muchas personas enfermas y cansadas de Hamás.
¿Las únicas personas que no lo están? Los manifestantes que ocultan sus identidades detrás de pañuelos keffiyeh, se encadenan a vallas y marchan por las calles acosando a judíos. Ello son inmunes a la verdad.