Itongadol/AJN.-La Unión Europea aseguró el viernes que la reciente decisión de Israel, de aprobar la construcción de 98 nuevas viviendas en Cisjordania, debilita aún más la solución de dos estados en el conflicto israelí-palestino y pone en duda el compromiso de Israel de alcanzar un acuerdo de paz, haciendo eco de las críticas de la Estados Unidos esta semana que tal construcción riesgo para la paz con los palestinos.
El Servicio de Acción Externa de la Unión Europea, dirigido por Federica Mogherini, emitió un comunicado señalando que los planes para nuevas viviendas – destinados a los colonos de las casas que están a punto de ser desalojados del puesto de avanzada ilegal de Amona, bajo orden del Tribunal Supremo – son "en la práctica un nuevo asentamiento en el el norte de Cisjordania ", que "contradice a las anteriores declaraciones públicas hechas por el Gobierno de Israel de que no tenía ninguna intención de crear nuevos asentamientos".
También afirmó que los planes terminaran "minando la contigüidad de un futuro Estado palestino."
"La decisión de continuar la construcción y la expansión de asentamientos… debilita más que refuerza las perspectivas de una solución de dos estados para el proceso de paz en Oriente Medio, y hace que la posibilidad de un estado palestino viable sea más remoto", según el comunicado, añadiendo que "los asentamientos son ilegales según el derecho internacional "y" continua expansión de los asentamientos también pone en duda el compromiso de Israel para lograr un acuerdo negociado con los palestinos ".
Las autoridades israelíes declararon que los planes de construcción no violan ningún compromiso, no constituyen un nuevo asentamiento y no lleva más colonos a Cisjordania, ya que la construcción es de nuevos hogares para los colonos que ya están allí.
El gobierno estadounidense acusó a Jerusalem de un abuso de confianza, tras el anuncio de nuevos asentamientos. "Recibimos garantías públicas por parte del gobierno israelí que contradicen este anuncio," sostuvo el secretario de prensa de la Casa Blanca, Josh Earnest, el miércoles.