Itongadol/AJN.- El judaísmo británico promete no quedarse quieto mientras las políticas de asilo británicas restrictivas evitan que solo una pequeña porción de los refugiados sirios lleguen legalmente a las costas del Reino Unido.
Más temprano este mes, durante Jánuca (Fiesta de las Luminarias), tres de los movimientos religiosos judíos británicos dieron a conocer un video en el que anunciaban el lanzamiento de una campaña para reinstalar el patrocinio privado para los refugiados, un mecanismo que desapareció tras la Segunda Guerra Mundial.
Como el patrocinio privado de refugiados llevado a cabo actualmente por judíos canadienses, la trama británica involucraría a sinagogas, organizaciones comunitarias e individuos que tomarían la responsabilidad de reinstalar a familias sirias que huyen de la guerra civil de cuatro años que sacude a su país. “Una de las cosas que ha unido a las comunidades judías aquí es esta crisis. Los religiosos y los líderes están alzando su vos. Nada ha sido tan profundamente resonante para nosotros”, dijo la rabina reformista británica Laura Janner-Klausner.
Sin embargo, a diferencia de Canadá, el patrocinio privado no es una opción legal en Gran Bretaña. Los judíos británicos están limitados para registrarse como potenciales patrocinadores y prometen financiar una política de cambio con anticipación.
Desde la semana pasada, los movimientos del judaísmo reformista, liberal y masortí firmaron un registro de patrocinio privado establecido por Ciudadanos de Gran Bretaña, la mayor caridad comunitaria del país. Hasta ahora han prometido, en conjunto, 15.000 libras.