Itongadol/AJN.- Motivados por la justicia social, los estudiantes y las familias tienen sus corazones abiertos. Fue hacia el final del verano pasado que un grupo de padres tuvo la idea de ayudar a una familia de refugiados de Siria.
Con sólo 143 estudiantes, la escuela judía en Toronto puede ser pequeña, pero sus familias tienen un gran corazón. Entre los 35 grupos judíos canadienses que actualmente ayudan a las familias de refugiados sirios, esta es la única escuela.
Los canadienses judíos comenzaron a buscar el patrocinio de las familias de refugiados desde el verano pasado, según afirmó Janis Roth, director ejecutivo de los Servicios de Ayuda a Inmigrantes judíos en Toronto, la única organización en la comunidad judía del país que es Titular de un Acuerdo de Patrocinio.
Fue hacia el final del verano pasado que un grupo de padres de la escuela se acercó a la administración con la idea de ayudar a una familia de refugiados de Siria.
"Ha sido Angus Grant, un padre de un niño de cuarto grado y un estudiante que se graduó el año pasado, que ha encabezado este esfuerzo. Es abogado de refugiados y su familia recibió s una familia de refugiados vietnamitas cuando él estaba creciendo", explicó Dan Goldberg, director de la escuela.
Según Goldberg, la junta de la escuela aprobó la iniciativa sin demora.