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Itongadol/AJN.- El jefe ejecutivo del gigante de telefonía móvil francesa Orange dijo que terminaría la relación de su empresa con un operador israelí que paga para usar su nombre “mañana” si pudiera, pero que esto sería “un gran riesgo” en términos de penalidades.
Hablando ayer en una conferencia de prensa en el Cairo, donde estableció los planes de la empresa para los años que siguen en Egipto, Stephane Richard expresó que la intención de su compañía es retirar a Orange de Israel lo antes posible, pero que ese movimiento llevará tiempo. “Estamos seguros de que lo haremos. Estoy listo para hacerlo mañana pero sin exponer a la empresa a grandes riesgos”, remarcó.
Las declaraciones se hicieron mientras líderes israelíes han aumentado su retórica contra el movimiento BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones), el cual busca aislar a Israel de las inversiones internacionales, informó el medio israelí The Times of Israel.
Este martes, la unión de estudiantes británicos votó por cortar lazos con Israel, lo que atrajo fuertes condenas del Estado Judío, incluyendo de funcionarios que dijeron que le movimiento era antisemita.
La vicecanciller israelí, Tzipi Hotovely, escribió a Richard para pedirle explicaciones: “Debemos admitir que me han sorprendido esos reportes que no son acordes con una compañía global y responsable como Orange. Confío en que esos informes no reflejen las intenciones de su empresa. Y por lo tanto le pido que clarifique el tema lo antes posible”.
Por su parte, Yair Lapid, jefe del partido opositor Yesh Atid, criticó al CEO por sus comentarios y pidió que la empresa estatal francesa Telecom, que posee la mayor parte de Orange, se distancie de los comentarios. “Esta es una hipocresía de máximo nivel. No recuerdo que tuviese problemas en tomar el dinero y beneficiarse de los ciudadanos israelíes. El Estado de Israel es una isla de sanidad en un barrio difícil y ciertamente no aceptamos lecciones de moralidad de alguien tan autosuficiente y desinteresado”, agregó.