Itongadol/AJN.- “La comunidad judía de Bélgica está muy asustada” porque “hubo actos antisemitas y estamos muy expuestos, sobre todo después del asesinato en el Museo Judío” de Bruselas de cuatro personas, admitió hoy, viernes, un preocupado Serge Weinber, integrante de la misma, en una entrevista con la Agencia Judía de Noticias (AJN).
“Hay dos comunidades importantes: Amberes es parecido a Mea Shearim (un barrio de Jerusalem donde reside exclusivamente esa población), la mayoría es ortodoxa, lleva una vida normal y va por la calle sin esconderse; la otra es la de Bruselas, donde es más difícil” porque “la seguridad es muy alta y la gente está muy alerta y no usa kipá” por temor a agresiones, diferenció.
“Después del asesinato de mayo (en el museo) aumentaron los niveles de seguridad y ahora estamos volviendo a lo normal, aunque en verdad no lo es que tengamos que cuidar los centros comunitarios con procedimientos estándares”, más allá de que cada uno “tiene sus propias medidas”, lamentó Weinber.
“Ayer hubo un ataque” frustrado en Verviers, con dos terroristas abatidos, y “la Policía ha tenido que cerrar las escuelas” y disponer “patrulleros y efectivos las 24 horas”, agregó.
“Además, fueron a luchar en Siria aproximadamente 3.000 personas de aquí, que es un 10% de Bélgica porque es un país muy pequeño”, dimensionó el entrevistado a AJN.
“El problema de lo que pasó en Francia la semana pasada (por los atentados contra el semanario Charlie Hebdo y un supermercado kosher, que dejaron 17 muertos) es que, como siempre, los terroristas intentaron llegar a Bélgica porque tienen mucho apoyo y pueden siempre esconderse”, finalizó.
Como ejemplo de ello, la Policía detuvo el martes, en Charleroi, a un hombre por tráfico de armas y luego descubrió que estaba negociando con Amedy Coulibaly la venta de municiones para un arma calibre 7.62, como la pistola Tokarev que el terrorista usó islamista en el ataque antisemita.