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Itongadol.- Un grupo de 20 sobrevivientes del Holocausto llegó hoy a la Oficina de Autoridad de Población e Inmigración en Tel Aviv, Israel, para distribuir agua y canastas con regalos por la festividad judía Purim a cientos de buscadores de asilo que habían estado esperando afuera del edificio para renovar sus visas.
La iniciativa de involucrar a sobrevivientes del Holocausto, así también como a trabajadores y voluntaros de la Fundación para el Beneficio de Víctimas del Holocausto en Israel, se hizo después de que muchos de ellos se enteraran sobre las duras condiciones a las que se han enfrentado los buscadores de asilo en las últimas semanas.
Batya Rapaport, una sobreviviente de 75 años, explicó que esta es una iniciativa de sobrevivientes y trabajadores de fundaciones "que cada día ven a personas esperando horas bajo la lluvia, en el frío y condiciones insoportables". "Como sobreviviente del Holocausto aumenta el pensamiento, te lleva a un momento en el que éramos constantemente perseguidos y nuestras vidas estaban en peligro", dijo.
Según ella, quien de niña escapó del Gueto de Varsovia antes de que fuera eliminado, los sobrevivientes buscan entregar un mensaje: "Mas allá de la política, queremos decir que los seres humanos no pueden pasar por alto el sufrimiento de otras personas".
En las últimas semanas, desde que abrió una nueva oficina de inmigración en Tel Aviv, miles de buscadores de asilos con familia – incluyendo bebés, niños y mujeres embarazadas – han esperado en el lugar por horas, sin ningún refugio o acceso a baños.
"Cuando vi a las personas esperando aquí se me rompió el corazón. Cuando veo personas que huyeron de sus hogares y no tienen nada no puedo quedarme callada. Yo también estuve en esa situación, también fui un refugiado. La sociedad israelí tiene una historia y es por eso que no podemos ser indiferentes al sufrimiento humano. Ese debería ser nuestro principal pensamiento. Establecimos un país para dar un ejemplo moral", dijo Esther Miron, una sobreviviente del Holocausto de 80 años. Nacida en Hungría, ella fue deportada durante la Segunda Guerra Mundial al campo de exterminio Auschwitz Birkenau, donde muchos miembros de su familia fueron asesinados.