Itongadol/AJN.- El legislador Edelstein afirmó que la iniciativa ambiental parte de “una política irreversible” dirigida por el parlamento. El proyecto incluye la instalación de paneles solares y bombillas LED, entre otros cambios.
Como una legislatura que aprueba leyes ambientales, la Knesset (Parlamento israelí) debe practicar lo que predica, afirmó ayer el legislador del partido Likud Yuli Yoel Edelstein durante el lanzamiento del proyecto "Green Knesset", que convertirá al parlamento israelí en el más verde del mundo.
"Green Knesset", el proyecto bandera de Edelstein, está encabezada por los legisladores Dov Khenin (Hadash), Zvulun Kalfa (Habayit Hayehudi) y Nitzan Horowitz (Meretz), y se llevará a cabo bajo la supervisión del director general del Parlamento, Ronen Plott.
El objetivo del proyecto de varios años es convertir la Knesset en una legislatura que sea guía en su conducta por el concepto de sostenibilidad (un concepto multidimensional e interdisciplinario que examina nuestras vidas, en su conjunto, en términos del medio ambiente, sociedad y economía).
Edelstein explicó que a pesar de que el proyecto requiere una inversión financiera significativa “dará sus frutos y retornará la inversión", y agregó que el proyecto "Green Knesset" constituye la declaración de una "política irreversible" dirigida por el Parlamento.
El proyecto consistirá en numerosas actividades, incluyendo la educación de los diputados y empleados de la Knesset sobre el medio ambiente y alentándolos a participar en actividades relacionadas con el medio ambiente; publicar documentos de posición sobre la cuestión; poner en marcha proyectos que harán que el Knesset un lugar más sostenible y hacer las actividades operacionales cotidianas en la Knesset más sostenible también.
El ministro de Protección Ambiental Amir Peretz expresó durante la presentación: "En un momento en que mi oficina está liderando una revolución ambiental en la industria y en los hogares de los residentes, el símbolo del país debe convertirse en un elemento principal de la revolución verde, ya que es deber de la Knesset proteger a las próximas generaciones y resguardar el medio ambiente es la manera de hacerlo. Los que quieran pensar ahora deben hacerlo en verde".
El evento del miércoles marcó el inicio de la primera fase del proyecto, que se ejecutará a lo largo de 2014 y 2015. Esta fase se caracteriza principalmente por 13 empresas que se centran en la energía y el agua. Entre otras cosas, incluirá la construcción de un campo solar de 4500 metros cuadrados para la producción de electricidad a partir de energías renovables; la sustitución de cientos de bombillas con bombillas LED, la sustitución de los sistemas de aire acondicionado con un centro de energía, que apaga automáticamente todos los equipos al final de la jornada de trabajo; se medirá la cantidad de agua utilizada para el riego en la Knesset y se adoptará un modelo de consumo de agua más económico, además de incluir la desalación del agua de los sistemas de aire acondicionado de la Knesset y el uso de esta agua para el riego y otros fines.