“Neviot ha llegado a una paralización. Los colegios están cerrados, al igual que las empresas y lugares de trabajo. La atmósfera es muy tensa y hay sirenas sonando constantemente. Este es un momento muy traumático para nuestros niños de Youth Futures (Jóvenes Futuros). Estamos tratando de hacer visitas a los hogares y crear un sentimiento de calma y rutina. También estamos tratando planear algo para el largo plazo, mientras estamos al tanto de que el sur de Israel podría seguir bajo ataque por un tiempo. Ahora la situación es muy frenética y desconcertante, y estamos enfocados en intentar de proveer seguridad emocional a nuestros chicos”, dijo Nati Bitan, administrador del programa Youth Futures, administrado por el Keren Hayesod, el cual nutre a los niños en riesgo y provee herramientas y la atención individual que necesitan para tener éxito.
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Los niños del sur de Israel necesitan asistencia inmediata.
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