La Corte del Distrito de Haifa falló en contra de la familia de la activista pro palestina estadounidense Rachel Corrie, arrollada por una excavadora militar israelí en 2003 en la Franja de Gaza.
En la sentencia, el juez Oded Gershon invocó el principio de la excepción de actividades combatiente, teniendo en cuenta que el personal de las Fuerzas de Defensa de Israel había sido atacado en la misma zona donde Corrie fue asesinada apenas unas horas antes.
Corrie, de 23 años, de Olympia, Washington, murió en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, el 16 de marzo de 2003, cuando una excavadora del Ejército israelí intervino durante una protesta de grupo pro palestino Movimiento Internacional de Solidaridad.
En la lectura de un resumen de 62 páginas, el juez describió investigación de Israel sobre el incidente y dictaminó que no tenía errores.
El Tribunal interpretó que Corrie podrían haber evitado el peligro y rechazó las afirmaciones de que el Ejército actuó de manera negligente en el incidente y rechazó la denuncia de la familia por los daños simbólicos.
El Ejército israelí no violó el derecho a la vida de Corrie, continuó, afirmando que ella se inserta en una situación peligrosa.
El Estado, continuó, no era responsable de los daños y perjuicios causados por la situación de combate pero no obstante calificó la muerte de Corrie "un lamentable accidente".
"Estoy herida", dijo Cindy, madre Corrie, después de la lectura del veredicto.
El abogado Hussein Abu Hussein, que representa a la familia de Corrie en el caso, afirmó que el tribunal ratificó la violación de los derechos humanos de Rachel.
Hussein señaló que el veredicto estaba tan cerca de la posición del Estado de que los abogados del Estado podrían haber escrito ellos mismos el veredicto.
La madre de Rachel, Cindy dijo que estaba profundamente entristecida por el veredicto.
"Desde el principio estaba claro que hay un sistema para proteger a los soldados y darles impunidad a costa de la población civil", dijo a los reporteros fuera de la Corte.
“La diplomacia de Estados Unidos y el sistema judicial israelí fallaron a mi familia”, dijo Cindy Corrie, a lo que añadió que “nunca hubo una investigación creíble sobre la muerte de su hija”.
Sin embargo, afirmó que "al menos hemos tenido acceso a un sistema judicial, lo que mayoría de los palestinos se les niega".
Corrie estaba protestando por las injusticias en Gaza cuando fue atropellada por una excavadora del ejército israelí, dijo el abogado, acusando al Estado y al Ejército de violar sus derechos humanos.
La familia de Corrie presentó la demanda civil contra el Ministerio de Defensa en el tribunal de distrito hace siete años. Ellos afirman que el Ejército israelí mató a Corrie ya sea deliberadamente o por lo menos es culpable de negligencia grave.
Funcionarios de Estados Unidos criticaron la investigación militar del caso, diciendo que no había sido ni exhaustiva, ni creíble. Pero el juez dijo que la investigación había sido apropiada y no fijó ninguna responsabilidad sobre la fuerza.
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