Siria se postuló para ingresar al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas a pesar de la virtual guerra civil imperante en ese país y la represión del régimen de Bashar al-Assad (foto) a sus opositores, que incluiría crímenes de lesa humanidad, según numerosas denuncias en ese sentido.
La decisión será adoptada por la Asamblea General de la ONU el año que viene, pero la virtual “mayoría automática” de países no democráticos hace más que probable que la candidatura de Damasco sea aprobada.
Actualmente integran ese organismo naciones como China, Cuba y Arabia Saudita y se sumarían Pakistán y Venezuela.
Ante los temores de que ello se concrete, los Estados Unidos y la Unión Europea tomaron la decisión sin precedentes de pedir al consejo que declare de antemano que Siria está inhabilitada para unirse al mismo porque “no cumple con los estándares para una membrecía”.
En una reunión informal realizada ayer, miércoles, en la sede del organismo en Ginebra (Suiza), Cuba se declaró “totalmente en contra” y exigió la supresión de ese párrafo porque es la Asamblea General la que debe decidir a quién elegir, una posición rápidamente apoyada por China, según informó la organización UN Watch.
“No nos gusta hablar de candidaturas de países”, agregó Egipto.
En tanto, Brasil sostuvo que la referencia a la membrecía estaba “fuera del alcance de la resolución”.
Por su parte, Rusia insistió en que no se adopten medidas hasta que la candidatura sea presentada oficialmente, y la India consideró que abordar el tema era “prematuro”.
11/09/2024