Un grupo de 70 familias de víctimas del terrorismo le escribieron una carta al embajador de los Estados Unidos en Israel, Dan Shapiro, solicitándole una reunión urgente para debatir el destino del espía israelí Jonathan Pollard (foto) y transmitirle un mensaje a Barack Obama, ya que los presidentes norteamericanos suelen indultar a presos entre Acción de Gracias y Navidad.
Entre los firmantes de la misiva se destacan Yehuda y Esther Wachsman, cuyo hijo Najshón fue secuestrado y asesinado en 1994.
Un vocero del grupo señaló que Shapiro tiene la reputación de preocuparse por los sentimientos de la opinión pública israelí, de modo que esperan que tome en serio la petición.
“Salvar la vida humana es el más sagrado de los valores”, alegó Yaniv Chen, cuyo hermano Yaron fue secuestrado y asesinado en 1993.
“Hemos pagado un alto precio, que nos acompaña toda nuestra vida, y el presidente Obama tiene la oportunidad de salvar una vida con el único precio de hacer lo que es moral y justo (porque) está claro que el encarcelamiento de Pollard debe cesar”, agregó.
“Hay muchos altos funcionarios estadounidenses que solían oponerse a la liberación de Pollard y ahora están decididos en su apoyo”, recordó la cantante Ruhama Raz, cuya hermana fue asesinada en el ataque terrorista al autobús 405 que une Jerusalem y Tel Aviv, en 1989.
“Creo que nuestra petición humanitaria podría ayudar a poner fin a esta horrible tragedia”, añadió.
Si bien la campaña Liberen a Pollard aseguró que la embajada había reconocido que recibió la carta y se la entregó a Shapiro, su vocero negó estar al tanto de tal reunión.
Jonathan Pollard comenzará el lunes el 27º año de su condena a cadena perpetua por enviar información clasificada a un aliado.
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