Rahm Emanuel, alcalde de Chicago y ex jefe de gabinete del presidente estadounidense, Barack Obama, aseguró en un artículo de opinión publicado por The Washington Post que, en su polémico discurso sobre Medio Oriente de hace dos semanas, el mandatario “nos recordó que todos los presidentes (norteamericanos) y muchos líderes israelíes electos han reconocido que las fronteras son un punto de partida para las negociaciones, no el punto final”, lo cual “no implica un retorno a los límites de 1967”.
“Ninguna solución viable prevé ello”, recalcó el funcionario, que como “hijo de un inmigrante israelí” ratificó su “profundo y permanente compromiso con la supervivencia, la seguridad y el éxito del Estado de Israel”.
En cambio, “los intercambios territoriales ofrecen la flexibilidad necesaria para garantizar fronteras seguras y defendibles y abordan la cuestión de los asentamientos”.
Para Emanuel, el crecimiento demográfico palestino, sus intentos unilaterales para crear un Estado, los avances armamentísticos y las recientes rebeliones árabes ponen “en juego la supervivencia de Israel como Estado judío y democrático”.
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