El “boicot” estaba anunciado hace varios meses por el artistas del teatro israelí y académicos, que se rehusaron a actuar en un nuevo centro cultural en Ariel solo porque estaba en Samaria. En una carta que escribieron a la dirigencia nacional de teatros en Israel, los artistas y actores dijeron que no se deberían llevar a cabo obras en Judea y Samaria ya que hacerlo en estos lugares, como Ariel, iba “contra sus consciencias”.
La situación aumentó rápidamente y causó un estallido político, que resultó en que varios miembros del parlamento israelí (Knesset) amenazaran con cortar fondos a los artistas que se rehúsaran a aparecer en el teatro Ariel, que abrió igual hace unas semanas.
Ahora, los artistas americanos esperan lo mejor de esta situación. Craig Dershowitz, director ejecutivo de Artists 4 Israel y quien llevó a los artistas de graffiti a Ariel, dijo: “Los escritores de graffiti están acostumbrados a hacer arte donde la gente le dice que no lo hagan y cuando les contamos lo que pasaba en Ariel se unieron para ayudar”.
Estos artistas habían dicho que la decisión de los boicoteadores estaba atacando la necesidad básica humana de la belleza. Dijeron: “Cuando nos enteramos de lo que pasaba vimos que esto estaba yendo en contra del arte. El arte es para la gente, no para los políticos”.
Los artistas de graffiti estarán creando murales en todo Ariel. También se verán en refugios anti bombas. “No podemos descartar la necesidad de estos lugares, pero podemos convertirlos en trabajos de belleza”, dijo Dershowitz. Además, los artistas darán clases de pintura gratis en escuelas locales y niños de los centros comunitarios.
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