El presidente libanés, Michel Suleiman, dijo ante los periodistas que Israel perpetraba amenazas en dirección al Líbano -incluidos los informes de que Siria armaba a Hezbolá con misiles Scud- con el fin de desviar la atención de las conversaciones de paz estancadas.
Mientras tanto, el canciller egipcio, Ahmed Aboul Gheit, se reunió con sus homólogos francés y español en Luxemburgo esta semana para discutir su preocupación por un posible ataque israelí sobre el Líbano a raíz de los informes sobre la transferencia de misiles Scud.
Los tres ministros coincidieron en que Israel debe detener la posibilidad de una nueva guerra con el Líbano, según dijeron los diplomáticos citados por el diario israelí Haaretz.
Según las fuentes, los ministros también discutieron las formas para proteger el Líbano en el caso de Israel o cualquier otro país se decidiera a atacar las instalaciones nucleares de Irán.
Las declaraciones del canciller egipcio se producen días después de su visita a Beirut este fin de semana, cuando rechazó como "ridículas mentiras" las acusaciones de que Siria misiles Scud transferido a Hezbolá.
Por su parte, el comandante del ejército del Líbano, Jean Kahwaji, dijo a Gheit durante una reunión de fin de semana que estaba convencido de que no hay misiles Scud en el país, ya que sería imposible llevarlos a través de la frontera sin ser detectados por los libaneses.
AF