En una rueda de prensa retransmitida por televisión, el portavoz del Ministerio de Exteriores, Hasan Ghashghavi, insistió en que no ha habido ningún cambio en la postura de la República Islámica sobre la cuestión nuclear.
El responsable iraní destacó que Irán no suspenderá el enriquecimiento de uranio, aunque reconoció que el Ejecutivo está dispuesto ‘a dialogar para acabar con las preocupaciones de algunos países’.
‘Al mismo tiempo, esperamos que los países occidentales reconozcan el derecho nuclear de Irán de acuerdo con las normas internacionales’, añadió.
En este sentido, el portavoz espera que el propio Obama aplique el lema del cambio que utilizó durante su campaña ‘para cambiar la política del enfrentamiento por la política del diálogo’.
Señaló, por otro lado, que ‘las autoridades políticas deben respetar las reglas internacionales’, y recordó que Irán es miembro del Tratado de No Proliferación, por lo que, añadió, sus actividades están controladas por el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA).
‘El TNP incluso insta a los países que tienen la tecnología nuclear a ayudar a aquellos otros que no la tienen’, manifestó Ghashgavi.
Obama, tras ganar las elecciones estadounidenses, aseguró que el desarrollo de un programa de armamento nuclear por parte de Irán es ‘inaceptable’, aunque las autoridades iraníes siempre han negado este extremo y han subrayado que su programa nuclear tiene fines pacíficos.
Irán lleva a cabo un programa nuclear que ha suscitado dudas en gran parte de la comunidad internacional, con Estados Unidos a la cabeza, que teme que pueda ser desviado para fines militares, a pesar de que Irán lo ha negado repetidas veces.