"Debemos enfatizar que la propuesta (egipcia de tregua) no es resultado de ninguna negociación israelí con Hamás. Todos los contactos en este sentido han sido llevados a cabo por el Gobierno de Egipto. La posición israelí de considerar Hamás una organización terrorista no ha cambiado un ápice", afirmó hoy el ministerio de Exteriores de Israel en un comunicado.
"La iniciativa egipcia no otorga ninguna legitimidad a Hamás e Israel continuará presionando para el aislamiento justificado de Hamás por parte de la comunidad internacional", añade la nota.
Según exteriores, los objetivos de la tregua, que dio inicio hoy a las 06.00 hora local (03.00 GMT) son: el cese completo del "terrorismo y fuego contra Israel por parte de todas las facciones", el fin del tráfico de armas y la liberación del soldado israelí Gilad Shalit, capturado hace dos años en Gaza.
Hamás, por su parte, ha negado que Shalit forme parte del pacto de tregua y ha asegurado que Israel se ha comprometido a levantar el bloqueo a la franja y a reabrir gradualmente los puestos fronterizos.
A este respecto, la nota de Exteriores dice que "si se restaura la calma, Israel incrementará la cantidad y el tipo de productos que entran en la franja de Gaza, lo que derivará en una mejora de la calidad de vida de la población civil palestina", pero no hace mención a la reapertura de los pasos.
El Gobierno israelí ha dejado claro que cualquier fuego procedente de Gaza supondrá una violación del acuerdo y que considerará responsable a Hamás de sus consecuencias, aunque este proceda de otra facción palestina.
También advierte que responderá a todas las infracciones y que, "debido a las dudas que rodean la tregua, Israel tiene otras opciones preparadas".
"Israel es consciente de que la calma podría ser frágil y corta, pero cree que es importante dar una oportunidad a cualquier vía que pueda llevar a una solución no violenta del problema de Gaza", añade el comunicado.