«La visita del primer ministro ocurre en el contexto de un proceso de consultas entre altos funcionarios estadounidenses y líderes israelíes destinadas a promover la paz y la seguridad en Oriente Medio», indicó la Casa Blanca ayer lunes al anunciar el encuentro entre Bush y Sharón.
El último encuentro de ambos líderes ocurrió a comienzos del mes pasado, pero la visita de Sharón fue interrumpida el 7 de mayo cuando tuvo que volver a Tel Aviv tras un nuevo atentado suicida palestino que se causó 15 muertos.
El anuncio oficial indicó que Sharón y Bush se reunirán el próximo lunes en la Casa Blanca en tanto que el encuentro con Mubarak, considerado un factor crucial en los esfuerzos de paz para el Oriente Medio, ocurrirá dos días antes en el retiro presidencial de Camp David, en el vecino estado de Maryland.
Hasta ahora no se ha precisado cuántos días permanecerá Sharón en EEUU, pero fuentes diplomáticas señalaron que es posible que el primer ministro israelí visite el Congreso para confirmar el apoyo de los legisladores a su país.
Fuentes diplomáticas dijeron que las reuniones y el envío de Tenet y Burns a Oriente Medio son el resultado de una decisión del presidente Bush de asumir una actitud más activa en la búsqueda de paz tras haber mantenido cierta distancia ante el conflicto en sus primeros meses en la Casa Blanca.
El principal objetivo de Tenet es procurar un fortalecimiento de las medidas palestinas de seguridad que no han logrado impedir hasta ahora los ataques de extremistas que han motivado las incursiones militares israelíes en los territorios palestinos.
Burns está buscando ideas de los líderes árabes sobre la forma de conseguir cambios democráticos en la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que preside Yaser Arafat.
«Sin duda que la creación de instituciones fuertes y responsables en la ANP es parte importante de la estrategia del presidente», declaró Philip Reeker, portavoz del Departamento de Estado.
Reeker agregó que en estos momentos EEUU ha establecido una estrategia diplomática que tiene tres objetivos: establecer un aparato de seguridad palestino eficiente, impulsar un proceso político serio dirigido a una solución que permita la existencia de dos Estados y responder a las necesidades humanitarias del pueblo palestino.
Funcionarios de la Casa Blanca habían sugerido la semana pasada que el Gobierno de Bush estaría considerando un cambio de política que incluya la presentación de un programa para las negociaciones de paz.
Esto sería un cambio considerable pues hasta ahora el presidente Bush había dicho que la estructuración de un programa de ese tipo sólo correspondía a las partes en conflicto.
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