Itongadol.- La llamada “sociedad del conocimiento” caracterizada por la generación y acumulación de la información, la velocidad en la transmisión y la difusión de saberes debido al uso simultáneo de múltiples medios, demanda nuevas formas de alfabetización y comunicación. En este contexto, se torna imprescindible desarrollar en nuestros alumnos capacidades vinculadas a una comprensión genuina de procesos complejos, mientras estimulamos el pensamiento lógico, la resolución de problemas, la indagación científica y el pensamiento computacional.
Esto exige a su vez una manera particular de aprender, comunicarse y establecer vínculos con las nuevas tecnologías. Esto no solo no nos exime de enseñar el uso significativo y potente que se deriva de los dispositivos tecnológicos, sino que nos exige profundizar y complejizar la enseñanza con estas herramientas.
Desde esta perspectiva, el área de Coding (Programación) nos permite profundizar en un Aprendizaje Basado en Problemas (APB) a través del cual favorecemos por parte del alumnado distintas acciones creativas: creatividad para resolver problemas, creatividad para crear proyectos, creatividad para superar errores, creatividad para mejorar las propias producciones.
Al programar, los chicos elaboran estrategias, explican y argumentan sus ideas, discuten con sus compañeros, anticipan posibles resultados y justifican los procedimientos que permiten alcanzarlos, comparan sus producciones con las de otros, aceptan errores y críticas en forma constructiva y logran incorporar otros puntos de vista. Aprendiendo a programar los alumnos no solo desarrollan entonces el pensamiento computacional, sino que se convierten en emprendedores al planificar, ejecutar y evaluar proyectos. La programación fomenta la creatividad y la autonomía, aumenta la motivación, se exploran distintas maneras de comunicar ideas y estrategias de resolución de problemas.
En Arlene Fern utilizamos la programación para programar distintos tipos de robots adecuados a las distintas edades y distintas herramientas digitales para realizar producciones y fomentar la creatividad. En las clases de primer ciclo de primaria los chicos desarrollan su pensamiento computacional mediante el uso de juegos especialmente diseñados para su primera inmersión en el mundo de la programación. En grados superiores continúan con su formación en ciencias de la computación, a través del aprendizaje de su primer lenguaje de programación, Scratch, que permite programar y generar código de manera más tradicional pero simplificando su escritura y estructura mediante el uso de bloques. Los alumnos, a medida que dominan nuevos funciones y comandos, logran complejizar sus producciones y poner en marcha su creatividad para crear animaciones, juegos e historias.
La materia Coding, impartida íntegramente en inglés, se inserta en el enfoque CLIL (Aprendizaje Integrado de Contenidos y Lenguas Extranjeras) para estimular un uso relevante y significativo que potencie el aprendizaje de esta lengua.