Agencia AJN.- Amjad Jabarin, un hombre de 35 años de la ciudad de Umm al-Fahm, fue acusado hoy por ayudar a tres árabes israelíes a llevar a cabo el ataque terrorista en el Monte del Templo el pasado julio, que se cobró la vida de dos policías israelíes.
Fue acusado de ser cómplice del asesinato al ayudar a los terroristas con el uso de armas, la obstrucción de la justicia, y la conspiración para cometer un crimen. Jabarin condujo a dos de los terroristas la noche antes del ataque a una parada de autobús de la que viajaron a Jerusalem, a pesar de saber que estaban armados y se dirigían al Monte del Templo para llevar a cabo un ataque.
Los terroristas Muhammad Ahmad Muhammad Jabarin, de 29 años, Muhammad Hamed Abed al-Atif Jabarin, de 19 años, y Muhammad Ahmad Mafdel Jabarin, de 19 años, asesinaron al oficial Ha’il Satawi y al oficial Kamil Shnaan en el complejo del Monte del Templo el 14 de julio de 2017. Sin embargo, fue un colaborador el que los había ayudado a ingresar las armas -dos armas de Carl Gustav, una pistola y cuchillos- en la Mezquita Al-Aqsa.
El día del ataque, los terroristas llegaron de la dirección de la Puerta de los Leones y mataron a los dos policías. Fuerzas en la zona dispararon y mataron a los atacantes.
La investigación de Shin Bet reveló que la célula terrorista se formó en la Mezquita Al-Malsa en Umm al-Fahm, donde uno de los terroristas, Mohammed Ahmad Muhammad Jabarin, trabajó como guardián y almuédano. La mezquita, que está afiliada a la ilegal rama norte del Movimiento Islámico, es también donde los terroristas ocultaron las armas antes del ataque.
Jabarin conoció a dos de los terroristas durante las oraciones en la mezquita y tomó parte en la práctica antes del ataque en una zona montañosa cerca de Umm al-Fahm. Fue invitado a unirse a la célula terrorista en al menos dos ocasiones diferentes, pero se negó.
Él condujo a dos de los terroristas la noche antes del ataque a una parada de autobús de la que viajaron a Jerusalem, a pesar de saber que estaban armados y se dirigían al Monte del Templo para llevar a cabo un ataque.
Los terroristas confiaron al cómplice Jabarin sus celulares, mensajes a sus familias y las llaves de la mezquita, que ocultó tras el ataque. La investigación de Shin Bet también encontró que los terroristas tenían vínculos con el Movimiento Islámico. Muhammad Ahmad Muhammad Jabarin también estuvo activo en el Mourabitoun, un movimiento islamista ilegalizado que opera en el Monte del Templo y que tiene vínculos tanto con el Movimiento Islámico como con la organización terrorista Hamás.