Itongadol.- Un tribunal polaco estableció una condena de 10 meses de prisión para un hombre que quemó la efigie de un judío ortodoxo en una protesta contra los migrantes el año pasado.
El juez Marek Gorny sentenció que el hombre, Piotr Rybak, fomentó el odio y cometió un acto de gran daño social. Rybak quemó el símbolo en una manifestación anti-migrantes organizada por un grupo de extrema derecha en Wroclaw, en el oeste de Polonia, en noviembre de 2015.
La sentencia fue más severa que los 10 meses de trabajo social recomendados por los fiscales. Habían sostenido que el acto de Rybak evocaba la quema de judíos durante el Holocausto y debía entenderse como una amenaza de aniquilación.
Rybak denunció el veredicto y juró apelar, diciendo: "Es una desgracia que un juez polaco emita un juicio contra un patriota polaco".