Itongadol.- El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, afirmó este jueves que el país está en alerta máxima y preparado para cualquier escenario tanto defensivo como ofensivo, remarcando que exigirán «un precio muy alto por cualquier acto de agresión contra nosotros desde cualquier frente».
Los comentarios del primer ministro se producen un día después del asesinato del líder político de Hamás Ismail Haniyeh en Teherán, atribuido a Israel, y tras el asesinato selectivo de Fuad Shukr, comandante militar de Hezbollah, el martes en Beirut.
«Después de que elimináramos al jefe militar de Hezbollah, hoy recibimos la confirmación definitiva de que el líder militar de Hamás Mohammed Deif murió [en el ataque contra Khan Younis del mes pasado]», agregó Netanyahu, durante una visita al Mando del Frente Interior
Además, señaló que »Deif fue responsable de la terrible masacre del 7 de octubre y de muchos ataques asesinos contra ciudadanos israelíes y estuvo en nuestra lista de terroristas más buscados durante muchos años. Su eliminación refuerza nuestro principio de que quien nos haga daño, será dañado».
Previamente, este miércoles, el primer ministro advirtió que Israel estaba en una guerra existencial contra Irán y su eje y que se »se avecinan días difíciles».
Unas 28 fábricas israelíes situadas a una distancia de 40 kilómetros de la frontera con Líbano recibieron la orden de agotar sus reservas de amoníaco, en previsión de que los disparos de cohetes al Estado judío lleguen más lejos que en los últimos casi 10 meses de guerra.
El discurso de Netanyahu se produjo luego de las declaraciones del Secretario General de Hezbollah, Hassan Nasrallah, en el funeral de Haniyeh, en las que detalló que el conflicto con Israel entró en una nueva fase y está abierto en todos los frentes.
«¿Creen los israelíes que pueden matar a Haniyeh en Teherán e Irán permanecerá en silencio? Irán considera el asesinato como un ataque a su soberanía y seguridad nacional. Una afrenta a su honor», sentenció Nasrallah.
A continuación, el líder del grupo terrorista hizo un llamamiento directo a la opinión pública israelí, expresando que «llorarán desconsoladamente porque no saben qué líneas rojas cruzaron».
En la misma línea, el ayatolá Ali Khamenei, líder supremo de la República Islámica, prometió este miércoles que Irán respondería y ordenó atacar al Estado judío como venganza por el asesinato de Haniyeh.
Antes del funeral, los principales dirigentes iraníes se reunieron en Teherán con representantes de sus aliados en Irak, Siria, Yemen y Líbano, para analizar su respuesta al asesinato del líder de Hamás.