Itongadol.- Las redes sociales del mundo árabe se vieron sacudidas la semana pasada, después de que Al Yazira Palestina, filial de Al Yazira, publicara un vídeo de un médico gazatí que afirmaba haber resultado herido en Nuseirat durante la operación Arnon para rescatar a los cuatro rehenes.
En el vídeo, se ve al médico llorando y gritando por las bajas, diciendo: «Es cierto que somos firmes»; pero entonces el vídeo se corta de repente, y se ve al hombre llorando de nuevo.
En una versión más larga y sin cortes del vídeo que circula por Internet, se aclara el motivo del corte y la edición. Durante su discurso original, el hombre también dijo: «Esta podrida dirigencia terminará culpándonos de que nosotros… es cierto que somos firmes, sin embargo, nuestra dirigencia es escoria. Nuestros dirigentes se acostumbraron a este derramamiento de sangre, que Alá cuente con ellos… Júrame que este video llegará a los líderes palestinos. Esta masacre de Nuseirat, ¡podríamos haberla evitado!».
No está claro cómo pretendía el hombre que se evitara la llamada «masacre». Algunos especulan con que se refería al hecho de que los civiles de la zona sabían que había rehenes en las casas de sus vecinos.
Al Yazira no ha confirmado el corte del vídeo, pero no sería la primera vez que el medio de comunicación intenta censurar o silenciar las críticas de los gazatíes a Hamás. En noviembre circuló un vídeo de un anciano gazatí herido que fue entrevistado en un hospital de Gaza por un reportero de Al Yazira.
«Y en cuanto a la resistencia [Hamás], se esconden entre la gente. ¿Por qué se esconden entre la gente?», preguntó el residente herido.
A continuación, se pudo ver cómo el reportero cortaba inmediatamente la entrevista e intentaba poner fin a la emisión, dejando al entrevistado sorprendido e intentando volver a su entrevista.
En diciembre, un vídeo diferente mostraba a una anciana entrevistada por un corresponsal de Al Jazeera que intentaba inducirla a admitir que no entraba ayuda en Gaza. Sin embargo, la anciana le dijo: «Toda la ayuda baja [clandestinamente a los túneles de Hamás] y no llega a la gente».
Cuando el reportero trató de seguir insistiendo en la versión pro Hamás, argumentando que «la gente dice que sólo entra un poco de ayuda y se distribuye», la anciana le movió el dedo con una sonrisa amarga y añadió: «Todo va a sus casas. Que Hamás me lleve o me pegue un tiro».
El reportero procedió a desestimar su opinión y volvió a la cámara.
El jueves, el Tribunal de Distrito de Tel Aviv aprobó una petición, presentada por el ministro de Comunicaciones, Shlomo Karhi, para renovar la prohibición temporal de Al Jazeera. En su sentencia, el tribunal citó las pruebas que se le habían presentado y que demostraban el «grave y preocupante impacto de los contenidos emitidos por el canal… [que] fueron motivo e incentivo para la acción de terroristas dentro del Estado» y que «Al Jazeera es percibida por la organización terrorista Hamás como su brazo propagandístico y de inteligencia».
La reticencia de Al Yazira a emitir críticas a Hamás puede considerarse parte de esta alianza entre el altavoz qatarí y el grupo terrorista.