Itongadol.- Un nuevo informe del Banco Mundial señala los críticos desafíos que deberá enfrentar la economía palestina en estos días.
Según el documento, la economía podría reducirse en un 7.6% en caso de un regreso gradual a la normalidad de la crisis, o un 11 por ciento si es una recuperación más lenta o con otras restricciones.
Se espera que la situación para la Autoridad Palestina (AP) sea cada vez más complicada debido a la caída de los ingresos y a un aumento importante en el gasto público para cubrir necesidades en materia de sanidad, sociales y económicas, en el contexto de la crisis del coronavirus.

Gaza en tiempos de coronavirus. Foto: Flash 90.
Incluso con la reasignación de algunos gastos, la brecha financiera podría aumentar de manera alarmante, de 800 millones de dólares en 2019 a más de 1.5 mil millones de dólares en 2020 para abordar adecuadamente estas necesidades.
El coronavirus fue contenido de manera ejemplar en los territorios palestinos donde viven- en Cisjordania y Gaza, unas 4,976,684 de personas según estadísticas oficiales- allí solo se registraron 628 casos, de los cuales 527 recibieron el alta y solo hubo que lamentar cinco muertes.
“Cuando la epidemia del coronavirus se encuentra en su tercer mes, la crisis afecta a la vida y fuentes de sustento de los palestinos”, indicó Khanthan Shankar, director del Banco Mundial para Cisjordania y Gaza.
Según el funcionario, “la Autoridad Palestina actuó de manera temprana y decisiva para salvar vidas. Sin embargo la disminución del apoyo y la limitación de los recursos económicos existentes convirtieron a la capacidad de la AP de proteger las fuentes de sustento en una tarea monumental. Por esto, el apoyo externo será crítico para ayudar al crecimiento económico palestino en este período sin precedentes”.
Ya antes de la crisis del coronavirus, más de una cuarta parte de la población palestina vivía bajo la línea de pobreza. Según estima el Banco Mundial, estas cifras podrían aumentar a 30% en Cisjordania y 64% en Gaza.
Más pronunciada es la tasa de desempleo entre los jóvenes, la cual se sitúa en 38%, estando muy por encima del promedio regional de Medio Oriente y África.

Trabajos de desinfección en la Franja de Gaza.
El informe señala que el potencial económico es limitado debido a las restricciones de movimiento de personas y bienes.
El documento aborda, entre otras cosas, el desarrollo de una economía digital para ayudar a cerrar esta brecha y la creación de empleos avanzados para la población palestina de alto nivel.
“La economía digital puede superar obstáculos geográficos, fomentar crecimiento económico y crear oportunidades de trabajo para los palestinos”, señaló Shankar.
“Con población joven experimentada en el campo de la tecnología, el potencial es enorme”, remarcó. Sin embargo, “los palestinos necesitan acceso a recursos similares a los que presentan sus vecinos, y necesitan ser capaces de desarrollar rápidamente sus estructuras digitales”.

Abu Mazen. Foto: AP.
El informe enfatiza que la infraestructura digital es fundamental para el desarrollo de una economía digital. En un momento en que otros países están contemplando el uso de 5G, los territorios palestinos se encuentran entre los últimos lugares en el Medio Oriente en lanzar 3G en Cisjordania y 2G en Gaza. Los operadores se encuentran en desventaja competitiva, ya que enfrentan restricciones en acceso, sitios para cobertura de red e importación de ciertos equipos de telecomunicaciones. Compiten contra operadores que pueden ofrecer servicios 4G / LTE sin licencia en Cisjordania y 3G en Gaza para quienes están cerca de las redes israelíes (a través de tarjetas SIM prepagas).
Actualmente, el Banco Mundial recomienda a la Autoridad Palestina implementar reformas específicas con Israel, entre éstas el desarrollo de una estrategia integral para el sector de comunicaciones, crear un ente regulador independiente y la priorización de una nueva legislación en materia de telecomunicaciones en línea con las nuevas prácticas internacionales.
El papel de los países que financien los proyectos es esencial para apoyar el desarrollo institucional necesario para el campo de las comunicaciones y ayudar en el programa de financiación innovador para reducir los riesgos políticos y aumentar las inversiones del sector privado.