Itongadol/AJN.- El periódico israelí Calcalist afirmó que la policía de Israel utilizó el software espía Pegasus de NSO Group contra funcionarios gubernamentales, alcaldes, activistas, directores ejecutivos de empresas, periodistas y familiares y asesores del ex primer ministro Benjamín Netanyahu.
Según el informe publicado hoy, la policía usó el software para piratear los teléfonos de ex directores generales de los ministerios de Finanzas, Justicia, Comunicación y Transporte; el destacado empresario Rami Levy; Ilan Yeshua, ex director ejecutivo del periódico Walla y actualmente uno de los principales testigos en el juicio contra Netanyahu; la alcaldesa de Netanya, Miriam Feirberg; Avner Netanyahu, hijo del ex primer ministro; líderes de protestas etíope-israelíes contra la policía, y muchos otros.
En total, la policía usó Pegasus para piratear, sin supervisión judicial, los teléfonos de docenas de personas que no eran sospechosas de delitos, afirmó Calcalist. El informe no especificó cuándo tuvo lugar el presunto hackeo, pero informó que se prolongó durante varios años.
Según el sitio de noticias, la policía no buscó la aprobación judicial para la medida porque no creía que fuera a ser concedida.
El mes pasado Calcalist había publicado la primera mitad del informe, tras el cual la policía negó haber utilizado el spyware contra ciudadanos que no eran sospechosos de delitos y dijo que todos los usos realizados estaban totalmente aprobados por la Justicia. Pero semanas después, la policía admitió que “se descubrieron hallazgos adicionales que cambian la situación en ciertos aspectos”, y dijo que cooperaría con todas las investigaciones.
Justo antes de dejar su cargo, el ex fiscal general Avichai Mandelblit nombró a los miembros de un comité de investigación sobre el tema, encabezado por el fiscal general adjunto Amit Marari.
Esta mañana, el portavoz de la policía de Israel, Eli Levy, dijo a la emisora pública Kan que la policía ha estado abierta “a una investigación completamente transparente”. Levy afirmó que hasta el momento no se ha encontrado “ningún defecto en el trabajo de la policía. Todo se hizo legalmente con una orden firmada de la corte”.
Entre los objetivos también se encontraban los colonos de Cisjordania justo antes de las evacuaciones programadas de los puestos de avanzada ilegales; los asesores de Netanyahu, Yonatan Urich y Topaz Luk; los alcaldes de Holon, Kiryat Ata y Mevaseret Zion; líderes de protestas por los derechos de las personas con discapacidad, y otros.
Calcalist señaló como responsables del espionaje al ex comisionado de la Policía de Israel Roni Alsheich, quien se desempeñó entre 2015 y 2018 y anteriormente fue subdirector del servicio de seguridad Shin Bet; al entonces jefe del departamento de tecnología policial Yosef Kahlon; y a Yoav Hassan, jefe de la división SIGINT.
La ministra del Interior, Ayelet Shaked, dijo el lunes por la mañana que si el informe es cierto, “es un terremoto, con acciones propias de regímenes opresivos de hace un siglo”.
Shaked dijo que los reclamos exigen una investigación externa: “La Knesset (Parlamento) y todo el pueblo merecen respuestas, hoy”.
Hablando en una conferencia el lunes por la mañana, el presidente Isaac Herzog dijo que se exige “una investigación profunda y exhaustiva”.
“No podemos perder nuestra democracia”, dijo Herzog. “No podemos perder nuestra policía, y no podemos perder el apoyo público en ellos”.
Por su parte, Avner Netanyahu le dijo a la Radio del Ejército que estaba “en estado de shock” por el informe. “Aparentemente, no importa si estás involucrado en política o no, también te sucederá a ti”.