Itongadol/AJN.- Todavía no pasaron dos semanas del mes de agosto e Israel enfrenta índices de mortalidad preocupantes por el coronavirus.
En lo que va de agosto fallecieron 115 personas por coronavirus, esto es casi el doble de los muertos en el mes de julio y 12 veces respecto al pasado mes de junio.
Más precisamente en junio murieron ocho personas, en julio 52 y en estas dos semanas de agosto 115.
De los fallecidos 98 eran mayores de 60 años. Cuatro pertenecían a la franja etaria de entre 40 y 60 años. Además, 71 de los que perdieron la vida estaban vacunados.
Si bien en el inicio de la actual ola, en la que la cepa Delta fue la dominante, la tasa de mortalidad en pacientes graves era baja en comparación con las anteriores olas, según cifras arrojadas por investigadores de la Universidad Hebrea, se puede apreciar como con el aumento de casos se elevaron los índices de mortalidad, cifra que se asemeja a los inicios de la pandemia.
Por esto, las esperanzas están puestas ahora en la tercera dosis de refuerzo. Las vacunas juegan un papel importante en el manejo de la pandemia. Por cada cien mil personas vacunadas mayores de 60 años, hay 16,7 pacientes graves.
Ahora, por cada cien mil personas mayores de 60 años no vacunadas, hay 93.5 pacientes de gravedad, es decir, casi cinco veces y medio. Las cifras hablan por sí solas.