Itongadol.- El presidente de Israel, Isaac Herzog, encendió este miércoles por la noche la primera vela de Jánuca (la Fiesta de las Luminarias) junto con veteranos heridos y soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF).
En su intervención en el acto realizado en Tel Aviv, Herzog habló de los esfuerzos en curso para asegurar la liberación de los 100 rehenes retenidos por Hamás en la Franja de Gaza.
En ese sentido, el presidente israelí (que ejerce una función protocolar mientras que la autoridad máxima es el primer ministro, en este caso Netanyahu) expresó: ‘‘Junto con ustedes, anhelo, trabajo y clamo de todas las maneras posibles por el regreso inmediato de nuestros hermanos y hermanas que están retenidos como rehenes en Gaza’’.
‘‘No creo que el año pasado, durante Jánuca, nadie pensara que un centenar de nuestros hermanos y hermanas seguirían en manos de los terroristas de Hamás’’, lamentó.
Con respecto a los plazos, Herzog afirmó que están ‘‘en un periodo crítico para su regreso. Recientemente, convoqué una conferencia en la Residencia del Presidente centrada en el estado médico de los rehenes’’.
‘‘Escuchamos a rehenes liberados y a expertos médicos, y basándome en sus testimonios y en todas las conclusiones que me presentaron, reitero que los rehenes corren un peligro claro e inmediato para sus vidas. Cada día que pasa, aumenta la amenaza para sus vidas’’, agregó.
En referencia al grupo terrorista palestino Hamás, el presidente israelí advirtió: ‘‘Nos enfrentamos a un enemigo cruel que busca por todos los medios perjudicarnos y obstaculizar el regreso de los rehenes, utilizando tácticas psicológicas en las negociaciones’’.
‘‘Contra este enemigo, sé que estamos trabajando y debemos seguir trabajando con creatividad, determinación, responsabilidad y un compromiso sin límites para traerlos de vuelta a casa por cualquier medio necesario, ya sea al abrazo de sus familias, ya sea para que descansen dignamente’’, añadió.
Herzog aprovechó la ocasión para pedir a los dirigentes israelíes ‘‘que actúen con todas sus fuerzas, utilizando todas las herramientas a nuestro alcance, para garantizar un acuerdo. Este es su deber. Es su responsabilidad. ¡Tienen todo mi apoyo para lograr un acuerdo que los traiga a casa! ¡Traigan el milagro de Jánuca al pueblo de Israel! ¡Especialmente para aquellos que no protegimos el 7 de octubre!’’.
‘‘Las voces de nuestros hermanos y hermanas nos gritan desde la tierra, recordándonos que quien salva una vida, incluso una vida, es como si salvara un mundo entero’’, concluyó.