Itongadol.- Israel registró más de 14.000 nuevos casos diarios de COVID-19, lo que indica un posible resurgimiento de la pandemia de coronavirus en el país.
Según el Ministerio de Salud, 14.460 personas dieron positivo por COVID-19 el lunes de unas 86.924 pruebas realizadas, lo que sitúa la tasa de positividad en 16,64%.
El número de reproducción del virus, R, que indica cuántas personas en promedio infecta un solo portador, también aumentó y ahora es de 1,33, lo que significa que el patógeno se está propagando en la comunidad.
Actualmente hay 320 personas hospitalizadas en estado grave, una marcada disminución en comparación con los 331 pacientes gravemente enfermos del lunes.
Sin embargo, hay un aumento significativo en el promedio de nuevos pacientes graves hospitalizados por día: el lunes pasado, 17 nuevos pacientes fueron hospitalizados, mientras que 33 fueron atendidos una semana después.
Según el ministerio, unas 10.431 personas han muerto por complicaciones relacionadas con la COVID-19 desde el comienzo de la pandemia.
El primer ministro Naftali Bennett dijo el lunes que, a la luz del aumento de los números de COVID, el mandato de la máscara permanecerá vigente en el futuro previsible, y dijo que «ha demostrado ser la herramienta más efectiva».
«Si usa una máscara y aún así se infecta, las posibilidades de enfermarse gravemente disminuyen considerablemente. La máscara y la vacuna son las herramientas más poderosas, y mientras no sea una nueva variante, entramos en una era endémica, donde el virus esta parte de nuestra vida», dijo el primer ministro durante la conferencia «Pueblo de Israel» de Ynet.
«Si hay una nueva variante, la estudiaremos y continuaremos a partir de ahí. La única ley en el contexto del coronavirus es comprender lo que está sucediendo y adaptarse a la situación».
La jefa de Salud Pública del Ministerio de Salud, Dra. Sharon Alroy-Preis, agregó: «El coronavirus está levantando, como lo hizo en el pasado».
«Seguimos diciendo que el COVID no ha pasado, está aquí y tenemos que aprender a vivir con él. Eso no significa enterrar la cabeza en la arena e ignorarlo», dijo Alroy-Preis, y agregó que la única forma de contrarrestar la propagación del patógeno es hacerse la prueba.
«[Protegemos nuestras] fronteras tanto como podemos, básicamente sabemos que todas las grandes olas nos llegaron desde el extranjero. Así que tratamos de proteger nuestras fronteras tanto como sea posible».
El funcionario de salud agregó que las restricciones previamente abolidas pueden regresar debido al reciente aumento en los casos de COVID, principalmente en el aeropuerto Ben Gurion, el principal puerto de entrada de Israel.
“Estamos considerando todo tipo de cosas. Traer de vuelta las pruebas de COVID antes de abordar el avión, si puede ayudar… Incluso hoy tenemos entre 600 y 500 recién verificados, que vinieron del extranjero, la mayoría de ellos, por supuesto, son israelíes. Entonces, tratamos de ver cómo podemos realmente reducir este riesgo, que proviene principalmente de fuera de nuestras fronteras».