Inicio ISRAEL Ataque combinado desde Siria, Irak, el Líbano, Yemen y Gaza y dentro de Israel: El guion del «Día del Juicio»

Ataque combinado desde Siria, Irak, el Líbano, Yemen y Gaza y dentro de Israel: El guion del «Día del Juicio»

Por IG
0 Comentarios

AJN/Itongadol (Por: Dr. Mordechai Kedar/Makor Rishon).- Nota para mis queridos lectores: Deliberé bastante sobre publicar las cosas que aparecen a continuación por el pánico que podrían generar en Israel, pero en la región de Medio Oriente -y en particular, en Irak- estas cosas son conocidas y sirven como tema de discusión abierta para bastantes personas, por lo que no es posible que el público en Israel no las conozca también, especialmente porque estas cosas le conciernen, y a su seguridad y existencia, mucho más que a los ciudadanos de Irak. Además, estas cosas surgen de vez en cuando en los medios israelíes, así que decidí mencionarlas aquí.

Así pues, una fuente que conozco hace años -un expatriado de Medio Oriente, partidario de Israel, que vive en Europa y está en contacto continuo con personas en Irán e Irak- me transmitió la evaluación de ellos de que Irán planea lanzar, en un futuro previsible, un ataque combinado contra Israel que incluya a todas las fuerzas a su disposición en los países árabes:

En el Líbano: Hezbollah y Hamas, con muchos miles de misiles y drones, algunos de ellos precisos.

En Siria: 17 unidades de combate («milicias») armadas y listas: Fatmiyon, Zinbion, Nujabaa, Hezbollah, la Brigada Abu al-Fachal, Asa’ib Ahl al-Haq, la Brigada Khorasani y otras. Irán ha transferido a Siria una gran cantidad de misiles y drones, y están listos para el lanzamiento.

En Irak: Decenas de milicias armadas con misiles y drones.

En Yemen: Los hutíes, que tienen misiles y drones de largo alcance que llegan a Israel.

En Gaza: Hamás y la YIP (Yihad Islámica Palestina), con misiles que pueden paralizar el aeropuerto Ben Gurión y bases de la Fuerza Aérea.

Sería razonable que Irán no lance nada desde su territorio contra Israel para no exponerse a una represalia.

Hasta aquí, la evaluación que me llegó desde Irak. Desde aquí, mi interpretación:

Con el pretexto del deber del mundo musulmán de salvar la mezquita Al-Aqsa de la ocupación y la opresión israelí, Irán organizará un ataque escalonado, integral, combinado y coordinado contra Israel. La primera fase será una lluvia conjunta de misiles y drones desde todas las áreas mencionadas y la estimación iraní es que el stock de interceptores de la «Cúpula de Hierro» se agotará dentro de las dos o tres horas desde el inicio del ataque aéreo y que después de ello, los cielos de Israel estarán abiertos y la Fuerza Aérea será dañada y puesta en tierra.

La primera fase, la aérea, estará acompañada con un ciberataque a los sistemas de infraestructura israelíes. Después de un día completo de ciberataque y lluvia de misiles y drones que golpeen bases de la Fuerza Aérea, unidades de almacenamiento de emergencia, bases del Ejército e infraestructuras eléctricas, informáticas, de comunicaciones, viales y acuáticas, comenzará la segunda fase: un ataque terrestre coordinado desde el Líbano, Siria y Gaza con fuerzas de infantería, motos y vehículos todoterreno equipados con armas antitanque, que cruzarán los obstáculos y atacarán a las fuerzas terrestres israelíes con el propósito de llegar lo más rápido posible a los poblados judíos.

El cálculo de los iraníes es que la movilización de los reservistas llevará varios días y, como máximo, será parcial por el lío que se creará en todo el país. Los refuerzos desde las unidades de almacenamiento de emergencia no llegarán a tiempo a los distintos frentes y, por eso, las fuerzas regulares colapsarán en cuestión de horas ante el ataque terrestre, como sucedió en el Canal (de Suez) y el Golán en la Guerra de Iom Kipur. La invasión de fuerzas terrestres desde Siria, el Líbano y Gaza se centrará en los poblados israelíes, con el objetivo de desmoralizar al público israelí y forzar al Gobierno a rendirse para salvar las vidas de los muchos israelíes que serán capturados por las milicias árabes e iraníes. Los medios israelíes, y especialmente los grupos de redes sociales, aumentarán el pánico del público israelí.

No está claro qué papel le atribuyen los iraníes a los palestinos en Judea y Samaria. Aun así, sería razonable que Hamás y la YIP los presionen para que hagan todo lo que esté a su alcance para dañar a israelíes -el Ejército, la Policía y civiles que se movilicen por los caminos-, además de ataques a poblados y bases militares.

Asimismo, los iraníes esperan que los árabes de la Galilea y el Neguev lleven a cabo acciones contra las FDI y el Estado, como bloqueo de calles, daño a puentes, derrame de petróleo en caminos, bloqueo de intersecciones, daño a líneas de alta tensión y ataque a lugares de población judíos. («Guardián de las Murallas al cuadrado.») Debido a que la Guardia Nacional aún no está operativa, esas acciones causarán un gran daño a Israel y su capacidad de resistencia frente a un ataque terrestre y, por otro lado, tendrán un costo muy bajo para quienes realicen esas actividades.

La cobertura internacional

Rusia y China, aliadas de Irán, «llamarán a ambos lados a cesar la violencia», apoyarán a Irán casi abiertamente y le proporcionarán información sobre lo que esté sucediendo en Israel. Turquía se unirá al llamado a cesar las acciones de violencia, pero implícitamente apoyará a Irán. En el mundo árabe e islámico saldrán multitudes a manifestaciones de apoyo a Irán y su accionar para la eliminación de la entidad sionista, en forma similar al apoyo que multitudes le dieron a Hassan Nasrallah en la Segunda Guerra del Líbano, en 2006. Esta vez, a diferencia de 2006, Arabia Saudita no adoptará una posición negativa respecto del ataque contra Israel.

Los gobiernos estadounidense y europeos no intervendrán militarmente, sino que se contentarán con palabras porque nadie en Occidente busca otro escenario de combate que el ucraniano, que vacía los depósitos de municiones de la OTAN y seca el impulso de sus líderes de involucrarse en guerras que no son suyas. Algunos verán en el ataque iraní una oportunidad para deshacerse del «dolor de cabeza» que Israel les causa hace años, y esta visión se ha intensificado en los últimos meses después de que el lío interno en el Estado de Israel le creó una imagen de país conflictivo y revoltoso, que tiene una fuerza civil atrofiada, que ha perdido toda voluntad de movilizarse y luchar, y por otro lado, un gobierno falto de rumbo, responsabilidad, gobernabilidad y fuerza, que ni siquiera puede lidiar adecuadamente con un corte de rutas.

Desde el punto de vista de Occidente, la destrucción de Israel no es tan terrible porque, de todos modos, Medio Oriente le mostraron la nuca a Occidente cuando Arabia Saudita y sus socios del Golfo, países mucho más importantes que Israel, decidieron darle la espalda a la débil coalición occidental y unirse a la poderosa alianza oriental, que se fortalece día a día e incluye a Rusia, China, Irán, Corea del Norte, Venezuela y otros.

El régimen iraní está muy impresionado por la continua voluntad, la estadounidense en particular y la occidental en general, de complacer a Irán, eliminar las sanciones en su contra y aceptarla como un miembro respetado de la familia de las naciones, con demostrado desdén por la carrera iraní hacia el bomba. Este comportamiento occidental infunde en los corazones de quienes toman las decisiones en Irán la sensación de que nadie en Occidente hará algo, ni la mitad de algo, a nivel militar práctico para detener un ataque aéreo y terrestre contra Israel como el descrito anteriormente.

Las fuerzas estadounidenses presentes en el este de Siria están destinadas a proteger los intereses estadounidenses, no los israelíes, e Irán ya ha demostrado varias veces que no tiene problema en atacar con misiles y drones a esas fuerzas estadounidenses. La administración estadounidense conoce la actitud negativa de la mayoría liberal de los judíos de los Estados Unidos hacia Israel, y en particular en los últimos meses, y por ello no le preocupa pagar un precio público y político demasiado alto si deja que Israel lidie solo con la invasión iraní. Biden, por supuesto, declarará ante las cámaras que «Israel tiene derecho a defenderse», pero intentará no dar pasos concretos.

Un ataque coordinado con misiles y drones no es una teoría. Irán ya le hizo algo así a Arabia Saudita el 14 de septiembre de 2019, y ese ataque causó daños enormes a la capacidad de exportación de petróleo de Arabia Saudita durante largos meses. Esa fue, probablemente, la razón de la abstención saudita a unirse a los Acuerdos de Abraham y el factor que empujó a Arabia Saudita, junto con otros factores, a abandonar recientemente los entendimientos que tenía con Israel y unirse al campo iraní. Los Estados Unidos, bajo la presidencia de Trump, y Europa nada hicieron contra Irán después del ataque en 2019, y por eso es seguro que hoy nada harán cuando Biden es el Presidente.

No sé qué tan realista es este escenario -un ataque aéreo y terrestre contra Israel-, pero aun si la posibilidad de que suceda en un futuro previsible es de solo el uno por ciento, el Estado de Israel debe actuar como un solo cuerpo y es muy importante que la coalición trabaje con la oposición a fin de preparar al país para este escenario en lo que respecta al Ejército, con todas sus ramas, tropas, fuerzas y bases, la Policía (incluida la Gendarmería y la Guardia Nacional), las infraestructuras eléctrica, de comunicaciones y transporte, la ciberdefensa y el ciberataque, la gestión de emergencias, el suministro de comida y agua, etc.

Si el público en Israel desea vivir, debería prepararse, mental y materialmente, para una guerra contra el pulpo iraní, que ha logrado sentar base en los Estados fallidos cercanos a Israel: el Líbano, Siria, Irak, Yemen y Gaza, todos países que casi nada tienen que perder. El dinero qatarí y el canal de la Yihad mediática Al Jazeera están constantemente vertiendo combustible para aviones en la hoguera del odio a Israel y preparando a la opinión pública de Medio Oriente y el resto del mundo para la gran batalla, la final. El dinero qatarí también compró a los políticos de Occidente para que no vieran lo que Qatar no quiere que vean, desde la violación de los derechos humanos y de los trabajadores extranjeros en Qatar hasta lo que el aliado de Qatar, Irán, planea hacerle a Israel.

Gente: ¡Despierten! Este peligroso guion puede ser realista.

También te puede interesar

Este sitio utiliza cookies para mejorar la experiencia de usuario. Aceptar Ver más