Itongadol.- La agencia de inteligencia turca MIT afirmó el lunes haber descubierto una red fantasma de agentes del Mossad que encuestaron a ciudadanos turcos y de otros países.
Según el periódico Daily Sabah, siete personas fueron detenidas y confirmaron las acusaciones.
La inteligencia turca afirma que 56 de los operativos estaban vinculados a diversas redes, todas ellas conectadas con la sede del Mossad en Tel Aviv, capaces de operar a escala internacional.
Los documentos del MIT revelan que los agentes recopilaban información utilizando diversos métodos de vigilancia, como sistemas GPS en vehículos, pirateando redes de Internet protegidas mediante WiFi y otros.
También seguían físicamente a objetivos filmando su actividad bajo el mando de un ciudadano árabe de Israel identificado como Suleiman Agbaria.
Las células israelíes estaban compuestas por ciudadanos de diferentes naciones de Oriente Próximo, que utilizaban sitios web ficticios en varios idiomas, pero sobre todo en árabe, para obtener información y direcciones IP.
Todas las comunicaciones entre los operativos de la red y el Mossad se realizaban a través de teléfonos móviles registrados con identidades falsas en España, Suecia, Gran Bretaña, Alemania, Indonesia, Bélgica y Malasia. Según el MIT, un agente del Mossad cuya verdadera identidad no se había determinado, utilizó un teléfono alemán para dar instrucciones a otro operativo bajo una supuesta identidad palestina, para que creara múltiples sitios en Internet. Éstos se utilizaban para conducir a determinados objetivos de la red a enlaces que contenían virus, de modo que sus teléfonos quedaran expuestos a hackeos.
Los agentes de Estambul recibieron formación en ciberseguridad y contaron con el apoyo técnico de una empresa cibernética de Tel Aviv propiedad de Fatal Kalahari. Kalahari, que estaba en contacto directo con los agentes del Mossad, les dio instrucciones sobre cómo vulnerar los teléfonos de los objetivos y qué se utilizaría para atraerlos a los enlaces web infectados.
La inteligencia turca también reveló que el Mossad envió agentes árabes desde Estambul a Líbano y Siria para recabar información y marcar objetivos que pudieran ser atacados por drones armados. También se enviaron agentes al barrio de Dahieh, en el sur de Beirut, bastión de Hezbolá, e identificaron las coordenadas precisas de un edificio que alberga a altos cargos del grupo terrorista respaldado por Irán.
Uno de los cabecillas de la red, que asumió la identidad de un ciudadano jordano residente en Suecia, dio instrucciones a uno de los agentes para que fotografiara un edificio de importancia estratégica en Damasco.
La inteligencia turca también afirmó que el Mossad había utilizado a docenas de espías, algunos ciudadanos de Turquía que recibieron formación en Tel Aviv, en una operación secreta que comenzó en Serbia, se trasladó a Dubai y terminó en Bangkok, todos destinos a los que los ciudadanos turcos pueden entrar sin visado especial. Un agente del Mossad -que había escapado previamente a Israel- enseñó a los operativos técnicas básicas de espionaje y cómo informar de su actividad .
Agentes del Mossad de Siria identificaron el despacho del presidente del consejo de administración de una empresa de inversiones siria y conspiraron para robarle el teléfono, el ordenador y documentos. Los mismos hombres participaron también en la vigilancia de ciudadanos egipcios en Estambul, entre ellos un médico y un periodista que había huido de su país.
El MIT afirmó que el Mossad tenía «oficinas» en Malasia, Indonesia y Suecia, todas ellas bajo las instrucciones de Tel Aviv. Según el MIT, la inteligencia israelí ponía a prueba la lealtad de sus agentes asignándoles la vigilancia de objetivos falsos en mezquitas, iglesias y lugares turísticos populares de Estambul. Sólo una vez confirmada su alianza con la causa, se les sometía a un régimen de adiestramiento en cinco etapas y posteriormente se les asignaban verdaderas misiones, a menudo en países extranjeros.
La revelación del lunes no era la primera vez que Turquía presumía de múltiples detenciones de presuntos agentes que trabajaban para el Mossad. El pasado mes de mayo se reveló una supuesta red de 15 agentes y se detuvo a seis de sus miembros. El MIT también desveló una red de espionaje rusa y frustró un complot iraní para atentar contra israelíes en suelo turco.