Itongadol.- El presidente francés, Emmanuel Macron, prometió una «lucha implacable» contra los extremistas islamistas en una ceremonia conmemorativa en memoria de los cuatro policías de París asesinados a puñaladas la semana pasada por un colega que se había convertido a una versión radical del Islam.
Mickael Harpon, un experto en informática de 45 años en el departamento de recolección de inteligencia de la policía, usó un cuchillo de cocina y un pelador de ostras para matar a una mujer y tres colegas varones en un alboroto de 30 minutos que terminó cuando un oficial lo mató a tiros.
«Vamos a librar una lucha implacable frente al terrorismo islamista», dijo Macron en la ceremonia en la sede de la policía, donde tuvo lugar el ataque.
Los asesinatos en el interior de la policía han conmocionado a Francia, donde se presiona al gobierno para que explique cómo la radicalización de Harpon no logró ser detectada.
Macron dijo que era «inconcebible e inaceptable» que Harpon, que había trabajado para la policía desde 2003, hubiera logrado llevar a cabo un ataque «en el mismo lugar donde perseguimos a terroristas y delincuentes».
Culpó del ataque a «un Islam distorsionado y mortal» que prometió «erradicar» y construir en Francia una «sociedad en estado de vigilancia», consignó la agencia de noticias AFP.
Llamó a toda Francia a unificarse y actuar para superar lo que llamó la «hidra islamista», refiriéndose a una serpiente de múltiples cabezas de la mitología griega.
Pero también advirtió contra caer en un clima de sospecha permanente, enfatizando: «Esta no es una lucha contra una religión, sino contra su distorsión que conduce al terrorismo».
El derramamiento de sangre del jueves, el primer ataque mortal en Francia en 10 meses, elevó a 255 el número de personas asesinadas en una serie de asaltos acusados o reclamados por radicales islamistas, principalmente el grupo Estado Islámico, desde 2015.
Las fuerzas de seguridad han sido atacadas regularmente.
En uno de los ataques más espeluznantes, una pareja de policías fue asesinada a puñaladas frente a su hijo de tres años en su casa cerca de París por un hombre que reclamaba lealtad a IS, que transmitió el ataque en vivo en Facebook.