Itongadol.- El Secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, afirma que en las reuniones que ha mantenido hoy con dirigentes israelíes, les ha dicho que cuando las IDF reanuden su campaña militar, deben designar claramente múltiples zonas seguras en el sur y el centro de Gaza para que los civiles eviten los combates. También debe evitar nuevos desplazamientos masivos de palestinos, dijo, evitar atacar «infraestructuras vitales» como hospitales, centrales eléctricas y plantas de tratamiento de agua, y permitir el eventual retorno de los palestinos desplazados al norte de Gaza.
En las últimas semanas, funcionarios estadounidenses que hablaron bajo condición de anonimato han hecho referencia a cada uno de estos puntos, pero ésta parece ser la primera vez que lo hacen de forma oficial, a medida que la administración intensifica su presión sobre Israel.
En una conferencia de prensa en Tel Aviv, Blinken reconoce que estas medidas son difíciles debido al uso de escudos humanos por parte de Hamás, pero insiste en que Israel sigue teniendo la obligación de minimizar los daños a los civiles.
Blinken comienza la rueda de prensa diciendo que la administración Biden «se centra inmediatamente en trabajar con nuestros socios para ampliar la pausa» en los combates entre Israel y Hamás, para que más rehenes puedan salir de Gaza y más ayuda pueda llegar a la Franja.
«No dejaremos de trabajar hasta que consigamos que todos los rehenes vuelvan a casa con sus familias y seres queridos», afirma Blinken, que añade que la cantidad de ayuda que entra en la Franja ha aumentado «significativamente».
Blinken afirma que Estados Unidos sigue respaldando el objetivo de Israel de derrocar a Hamás en Gaza. Israel tiene derecho a garantizar que la matanza del 7 de octubre no pueda repetirse, afirma, subrayando que Hamás no puede seguir controlando Gaza y no puede conservar la capacidad de sembrar la carnicería.
El mortal tiroteo terrorista de esta mañana en Jerusalem «subrayó» las intenciones del grupo terrorista. Hamás reivindicó el atentado «y calificó de ‘heroicos’ a sus autores», señala.
No obstante, «la forma en que Israel se defiende importa», afirma, y pide a Israel que ponga en marcha planes para evitar que se repitan las víctimas civiles en el norte de Gaza antes de operar en el sur de Gaza.
«Discutimos los detalles de la planificación en curso de Israel, y subrayé el imperativo, para Estados Unidos, de que la pérdida masiva de vidas civiles y el desplazamiento de la escala que vimos en el norte de Gaza, no se repitan en el sur», dice Blinken.
«Como le dije al Primer Ministro, la intención importa, pero también el resultado», afirma Blinken.
Señala que Hamás también tiene que tomar decisiones, y podría deponer las armas; liberar a los rehenes; entregar a sus dirigentes «responsables de la matanza, las torturas y las violaciones del 7 de octubre»; y renunciar a su objetivo declarado de eliminar a Israel y llevar a cabo nuevas masacres del 7 de octubre.
Blinken añade que el primer ministro Benjamin Netanyahu y el resto del gabinete de guerra estaban de acuerdo con el planteamiento impulsado por Estados Unidos para evitar víctimas civiles.