Itongadol.- Un tribunal de Minsk condenó en rebeldía a la ex nadadora olímpica Aliaksandra Herasimenia y al activista político Alexander Opeykin a 12 años de cárcel por pedir sanciones contra Bielorrusia.
«Fueron declarados culpables de llamamientos públicos a cometer acciones dirigidas a causar daño a la seguridad nacional de Bielorrusia, incluido el uso de medidas restrictivas [sanciones] contra Bielorrusia, personas físicas y jurídicas de la república», informó el lunes la agencia estatal de noticias BelTA.
Bielorrusia ha sido rechazada por las Naciones Unidas y muchos países por su represión de los opositores políticos, la sociedad civil y los periodistas. Según la embajada estadounidense en el país, hay más de 1.300 presos políticos en Bielorrusia.
Herasimenia, tres veces medallista olímpica, fue una de las atletas de élite que huyeron de Bielorrusia tras la represión contra quienes protestaban por lo que consideraban una reelección fraudulenta de Alexander Lukashenko en agosto de 2020.
Lukashenko, estrecho aliado del presidente ruso Vladimir Putin, ha negado haber cometido delito alguno. Aunque oficialmente no participa en la invasión de Moscú en Ucrania, Rusia ha utilizado territorio bielorruso para lanzar sus ataques en varios frentes.
Aleksander Opeykin es el presidente de la Fundación Bielorrusa de Solidaridad con el Deporte, cuyo objetivo es apoyar a los atletas detenidos y represaliados bajo el régimen autoritario de Lukashenko.
«Desde agosto de 2020 hasta el 20 de mayo de 2022, a través de los medios de comunicación e Internet, difundieron información deliberadamente falsa e invenciones sobre los acontecimientos que tuvieron lugar en el territorio de Bielorrusia, sobre el curso y los resultados de la campaña electoral de 2020», informó BelTA.
El tribunal también ordenó el embargo del apartamento de Herasimenia, su coche y 48.700 dólares en sus cuentas bancarias.
La líder de la oposición bielorrusa en el exilio, Sviatlana Tsikhanouskaya, a quien se considera la verdadera ganadora de las elecciones de 2020, condenó la sentencia del tribunal.
«¡Vergonzoso!» escribió Tsikhanouskaya en Twiter. «El régimen no puede llegar a ellos, pero sus propiedades en Bielorrusia fueron confiscadas, incluyendo un coche y un apartamento. Así es como el régimen intenta castigar a sus opositores en el exilio».