Itongadol.- Scholem Aleijem, posiblemente el autor popular más reconocido de la literatura judía en idish, nació el 2 de marzo de 1859 con el nombre de Scholem Yakov Rabinovitsh o Rabinnovitz en un shtetl (pequeño poblado judío) Periaslav, cercano a la ciudad de Kiev, en Ucrania.
Su madre Jaie Esther, fallece cuando tiene 13 años, y su padre, Menajen Nujem, vuelve a casarse. Los dichos de su madrastra, ordenados alfabéticamente, son el motivo de su primer escrito. A los 15 años, influenciado por la lectura de Robinson Crusoe, compuso una versión judía de la misma, y debido a la aceptación que la misma tuvo, decide dedicarse a ser escritor, firmando sus obras a partir de ese momento con el seudónimo que lo hará no sólo conocido y reconocido, sino inmensamente popular: Scholem Aleijem, el tradición saludo de los judíos que significa la paz esté o sea con ustedes.
Originariamente escribía en hebreo y ruso, además de idish, pero en 1893 decide hacerlo solamente en el idioma popular que hablaban los judíos ashkenazím. Ese mismo año se casa con Olga Loev, hija de un comerciante, de la que fue su maestro durante tres años y con quien tiene seis hijos: Lyla, Ernestina, Emma, Marusi, Elimelej y Najum.
En los años siguientes escribe una importante cantidad de obras y en 1890 ya es considerado el más popular de los escritores judíos europeos, lo que le permitió poseer una pequeña fortuna, parte de la cual dedicó a promover a otros escritores judíos, publicando sus escritos en 1888 y 1889 dos ediciones de “Die Yiddishe Folksbibliotek (La Biblioteca Yiddish Popular)”.
En 1890 pierde su fortuna en la Bolsa de Valores, y debido a ello el anuario deja de publicarse, mientras que Scholem Aleijen sigue escribiendo, pero debido a la situación económica lo hace en ruso para un periódico de Odessa, y en hebreo para la publicación de la intelectualidad judía rusa, Vosjod. También en el idioma bíblico escribe en Hamelitz y para la importante antología que editó Y.H. Ravnitzky.
Es en esos años que Scholem Aleijen enferma por primera vez de tuberculosis, trasladándose en 1891 a Odessa y luego a Kiev.
En 1905 viaja a en los Estados Unidos, mientras su familia se queda viviendo en Ginebra, Suiza, a donde regresa para seguir escribiendo y realizando giras por los centros judíos dando charlas y presentando sus obras.
En 1908, durante una de sus giras en Rusia, tiene una recaída en su enfermedad, y pasa dos meses internados en un hospital, quedando por cuatro años en un estado tal que casi le impedía escribir, y por lo tanto mantener a su familia. Durante este período la familia sobrevivió gracias a importantes donaciones de amigos y de admiradores.
En 1914, la mayor parte de la familia de Scholem Aleijem emigró a los Estados Unidos, residiendo en Nueva York. Su hijo Misha, enfermó de tuberculosis, debido a las leyes migratorias estadounidenses no pudo ingresar al país, debiendo permanecer en Suiza junto a su hermana Emma y murió en 1915, suceso que dejó a su padre profundamente deprimido.
Un año después, el 13 de mayo de 1916, Aleijem fallece en la ciudad de Nueva York, a los 57 años, y es enterrado en el cementerio judíos de Brooklyn, estimándose que acudieron 100.000 personas a rendirle homenaje.
Durante su vida fue un ferviente idishista, pero también adhirió al ideario sionista, que está presente en muchas de sus obras, fue miembro de los Jovevei Tzión (Amantes de Sion, agrupación juvenil que propiciaba que los judíos debían vivir en Eretz Israel) desde 1888, y en 1907 participó del octavo Congreso Sionista, efectuado en La Haya, representando a la comunidad judía estadounidense.
Si bien su obra “Tebie Hamiljeke” (Tevie el lechero) se ha convertido en la más conocida, habiendo sido llevada al cine en varias versiones y también convertida en obras de teatro, entre su innumerable obra creativa se destacan, entre otras, Funem Yarid, su autobiografía escrita luego de su larga convalecencia; las novelas Stempenyu, Las hijas de Tevie, Yossele Solovey, Mottel el hijo del Jazan (cantor litúrgico); las obras de teatro El Doctor, Der Get (El Divorcio), Tsezeht Un Tseshpreht (Dispersados lejos y de par en par), y también un ensayo Oyf vos badarfn Yidn a land (¿Por qué los judíos necesitan una tierra para ellos?).
Muchos de sus cuentos han sido publicados en volúmenes dedicados a la obra de Scholem Aleijem, y al igual que el resto de su obra traducidos al inglés, hebreo, castellano, entre otros idiomas.
Su popularidad, debido a la manera en que reflejó la vida judía de su época, lo convirtió en un adalid del ydidsh, haciendo que se lo valorara como el idioma nacional de los judíos de Europa Oriental, y tanto en las comunidades judías de la Diáspora como en Eretz Israel, innumerables instituciones llevan su nombre como permanente homenaje no sólo a su obra, sino a la difusión que realizó de la cultura judía.