Itongadol.- Gran indignación generó el hecho que un antisemita que se subió al subte de Nueva York y exigió que los “sionistas” se identificaran y bajaran del vagón fuera condenado a tan solo cuatro horas de servicio comunitario en una organización judía y se le ordenara asistir a un curso antiprejuicios.
En junio, Anas Saleh, de 24 años, lideró a unos manifestantes que en un vagón repleto de gente gritaron: “¡Levantá la mano si sos sionista!”.
El video del incidente provocó la condena generalizada de funcionarios públicos, incluida la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, y el alcalde de la ciudad, Eric Adams.
Saleh fue arrestado y acusado de coerción e intento de coerción. Sin embargo, esos cargos, que podrían haberle costado un año de prisión, fueron desestimados previamente por un juez debido a una “insuficiencia facial”, según The New York Post.
“No hay palabras para describir nuestro disgusto por este patético tirón de orejas”, dijo el grupo StopAntisemitism en X.
La Iniciativa de Seguridad Comunitaria, que protege a las comunidades e instituciones judías de la Ciudad de Nueva York, pidió esta fortalezca sus leyes sobre el discurso de odio.
“Estamos profundamente preocupados por el hecho que las leyes actuales de Nueva York sobre delitos de odio no clasifiquen las acciones de Saleh como delitos de odio”, afirmó la organización en un comunicado. “Vemos con preocupación la pena de servicio comunitario”.
El congresista neoyorquino Ritchie Torres afirmó que la débil sentencia alentará actos similares.
“Si intentás purgar a los judíos de lugares públicos como el subte, lo peor que podés temer en Nueva York es un servicio comunitario”, escribió en X. “El estado de Nueva York está enviando un mensaje peligroso que envalentona al antisemitismo”.
Saleh realizará su servicio comunitario en la Congregación Beit Simchat Torah, una sinagoga LGBTQ de Manhattan, dijo el Post.