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Itongadol/AJN.- El ejército israelí demolió la vivienda del jefe de la célula que asesinó – en octubre pasado – a Naama y Eitam Henkin frente a sus cuatro hijos. La casa del terrorista, identificado como Ahmad Muhammad Aliwi, fue demolida por efectivos del Cuerpo de Ingeniería de las Fuerzas de Defensa de Israel con respaldo de la Unidad de Infantería “Egoz”.
El ejército informó que la demolición de la vivienda se llevó a cabo después que la justicia consideró a Aliwi culpable de haber ordenado el ataque en el que fueron asesinados Naama y Eitam Henkin, en momentos en que se desplazaban por una ruta cercana al asentamiento judío Itamar, en la Ribera Occidental. Aliwi reclutó a los otros cuatro miembros de la célula que cometió el atentado, les dio instrucciones y les entregó las armas.
De acuerdo con el Servicio de Seguridad (Shin Bet), los sospechosos dijeron que en la noche del atentado, dos de ellos recorrieron la zona de los alrededores de Itamar y eligieron un sitio desde donde podrían disparar hacia un vehículo israelí. Otros miembros de la célula permanecieron cerca del lugar, según sus propios testimonios, para “despejar la carretera”.
El asesinato del matrimonio Henkin fue presenciado por sus cuatro hijos, todos ellos menores de edad, que se encontraban en el asiento trasero del vehículo.
A mediados del mes pasado fueron destruidas las casas de otros tres miembros de esta célula, incluyendo del autor material de los disparos que terminaron con la vida del matrimonio Henkin.
Durante la demolición de la vivienda de Aliwi en Nablus se produjeron algunos incidentes violentos y ataques contra las fuerzas de seguridad. A partir del momento en que se conoció la orden de demolición, grupos de palestinos de la zona organizaron guardias nocturnas para avisar cuando llegaran las fuerzas de seguridad y comenzaran la demolición, a fin de atacar a los efectivos israelíes.