432
Itongadol/AJN.- La presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, apuntó contra sus críticos tras afirmar que es el blanco de una conspiración de los "fondos buitre" de Estados Unidos, grupos de la comunidad judía y el fiscal de la causa AMIA, Alberto Nisman, quien murió en circunstancias sospechosas a principios de este año.
En una larga columna publicada en su sitio web oficial, Fernández alega una estrecha conexión entre grupos e individuos pro-israelíes que, dice, fueron conspirando a fin de socavar sus esfuerzos para asegurar el acercamiento a Irán. "Estamos frente a un modus operandi global, que daña gravemente no sólo la soberanía nacional, sino que también genera operaciones políticas internacionales de cualquier tipo, forma y color. Todo tiene que ver con todo", escribió la mandataria.
Sus comentarios tras las manifestaciones masivas en las calles por la muerte de Nisman, quien fue encontrado con una bala en la sien un día antes de que alegara en el Congreso que la presidente estaba encubriendo presunta participación iraní en el atentado contra el centro comunitario judío de la AMIA en 1994 porque quería un acuerdo comercial con Teherán.
Fernández afirmó en un principio que la muerte de Nisman fue un suicidio, pero luego declaró que probablemente fue asesinado por elementos no controlados de los servicios secretos que estaban conspirando contra ella. La investigación de su muerte, por su parte, está empantanada en la corte, donde las pruebas forenses contradictorias sugieren que podría haber sido cualquiera de las opciones: asesinato o suicidio.
Además, la presidenta declaró que Nisman dijo a los líderes de DAIA: "Si es necesario, Paul Singer nos ayudará." Esto acusó que sucedió hace dos años cuando Nisman presionó a la entidad que representa a los judíos del país, montar un desafío legal de un memorandum de entendimiento entre Argentina e Irán.
Nisman y sus partidarios alegaron que el memorando fue parte de una conspiración para encubrir la participación de Irán en el atentado a cambio de un acuerdo de comercio – una acusación negada por Irán y Fernández.
Las declaraciones de la Presidenta se basan en un artículo del periódico aliado al gobierno Página 12 de Jorge Elbaum, ex director ejecutivo de la DAIA, quien afirmó que Singer financió la oposición al acuerdo entre Irán y Argentina en Buenos Aires y Washington. El informe dice que Singer también donó 3,6 millones de dólares entre 2008 y 2014 a la Fundación para la Defensa de las Democracias, un centro de estudios cuyo director ejecutivo, Mark Dubowitz, que dice ser amigo de Nisman.
Fernández dijo que vio paralelismos entre estas actividades y el apoyo del gobierno israelí a los miembros del Congreso de EEUU que pretendían bloquear el reciente acuerdo nuclear entre Estados Unidos e Irán. En ambos casos, dijo que cabilderos y agencias encubiertas organizan ataques financieros y operaciones de desprestigio a los medios destinados a los gobiernos desestabilizados.
"Cualquier similitud no es casual. Todo tiene que ver con la geopolítica y poder internacional. A veces, sus efectos pueden ser en la paz mundial, tales como la prevención de la posibilidad de un acuerdo entre los EEUU y otras potencias con Irán en materia nuclear. O esos efectos pueden ser colaterales, como hacer imposible un acuerdo que contribuya traer la verdad y la justicia para las víctimas de la AMIA, después de 21 años".
Un portavoz de fondo de cobertura Elliott Management de Singer negó las acusaciones: "La afirmación de que el Sr. Singer tuvo contacto alguno con el señor Nisman es categóricamente falso. Este es sólo otro intento desesperado de Cristina Kirchner por culpar a los acreedores por escándalos que se multiplican en su administración y las políticas económicas fracasadas".
Los líderes judíos también respondieron airadamente a las afirmaciones del presidente. "Es una mentira. Es terrible, es increíble. Si ella cree que esto es cierto que presente la prueba en los tribunales", dijo el vicepresidente de DAIA, Waldo Wolff. Wolff dijo que las acusaciones de Fernández son "una cortina de humo" para encubrir la muerte de Nisman.
Pero el caso legal contra Fernández, inspirado por la investigación de Nisman, parecía haber sufrido un golpe casi fatal el lunes, cuando un fiscal desestimó las afirmaciones de que el presidente ayudó a proteger a los funcionarios iraníes supuestamente detrás del atentado de 1994. Citando pruebas suficientes para justificar una mayor investigación, el fiscal Javier De Luca dijo: "No ha habido ningún crimen."
El caso fue al principio rechazado tanto por un juez federal y una corte de apelaciones.
Las encuestas de opinión muestran que alrededor del 70% de los argentinos cree Nisman fue asesinado – pero que su muerte nunca será resuelto.