Se presentó el Libro “Diez días en Bombay – El Atentado”

A esas experiencias, relatadas en forma novelada, la autora le añadió la ficción: el por qué ciertas personas se convierten en terroristas, basándose en diversos trabajos que analizan este tipo de procederes.

Durante la presentación se aclaró que el libro fue solventado por la familia Borger y que el producto de la venta de los ejemplares será destinado a la obra que realiza Yeladeinu.

El director de Cultura de la AMIA, Moshé Korim abrió el acto efectuando una reseña del libro y de la biografía de la autora. Luego, Gerardo Mazur se refirió a la impresión que le causó la lectura de “Diez días en Bombay – El Atentado”, y manifestó la cercanía al aniversario del atentado a la Embajada de Israel y a la festividad de Pesaj. “En la tradición judía la pérdida de tiempo en hacer justicia es prácticamente un delito”, dijo. Sobre Pesaj sostuvo: “Es la historia del pueblo judío como hazaña de la libertad”. 

Luego se referió específicamente al libro y manifestó que “la condición indispensable de la identidad judía es saber leer. Parir un libro es como dar a luz, iluminar con la palabra el acontecimiento, conjugar a través del libro el milenario rol de la transmisión, en tanto re-trasmitir la identidad para ayudar a construir la propia, y en AMIA somos testigos de este nacimiento. ‘Diez días en Bombay – El Atentado’, que habla de un atentado atroz, está vivo porque nos habla, está sustentado por los valores heredados que movieron a su autora a escribirlo”.

El Rabino Tzvi Grunblatt, director de Jabad Lubavitch Argentina, por su parte, expresó: “Quiero marcar el gesto extraordinario de la señora Ite Borger de escribir este libro, debiéndose destacar tanto lo que la inspiró, como el gesto de escribirlo y editarlo. Lo que inspiró el libro es una pareja joven de chicos idealistas, puros que, estaban en la India no para adelantar una carrera personal sino para servir al pueblo judío, a quienes llegaban ahí y poder ayudarlos en algo material o espiritualmente”. 

“Ese es un ejemplo de pureza e idealismo, los cuales son muy importantes de rescatar en momentos en los que el mundo, desgraciadamente, apunta a que el objetivo sea tener una vida fácil, conseguir mucho invirtiendo poco, la ley del menor esfuerzo, que cada uno piense en sí mismo y después en los demás, o que no haya objetivos. Y aquí se nos habla de jóvenes que se dedican al pueblo judío sin ningún interés personal y con entrega total, que lo hacen de manera natural, no creyéndose héroes. Creo que eso inspiró a Ite y Guillermo, y por eso el libro se hizo en el mismo espíritu, porque hubo dos corazones judíos que vieron lo que eran esos dos jóvenes y sintieron la importancia del mensaje de esos dos shlimim: que hoy puede haber juventud idealista y pura, que cree en serio y trabaja por el pueblo de Israel y la Torá, y para ayudar a otros judíos sin esperar nada a cambio. Ellos no quisieron que lo que percibieron en Bombay se pierda”, agregó.

La Secretaría Política y Cultura de la embajada de la República de la India, Subhashini Narayanan, luego de explicar que el embajador Amarendra Khatua no pudo asistir por haber tenido que viajar al exterior, saludó a los presentes y remarcó el compromiso de su gobierno en la lucha contra el terrorismo

El presidente de DAIA, Julio Schlosser, invitado a decir unas palabras, explicó que concurrió a la presentación del libro junto a su esposa Susana por ser amigos de Ite y Guillermo Borger. También dijo: “Nosotros como pueblo judío estamos acostumbrados a sufrir lo que nos da la vida. Nos pueden quitar la libertad y nos pueden quitar la dignidad y la vida. Lo que no estamos dispuestos a perder, y nunca nos han podido quitar, es la esperanza. Y el libro de Ite esconde un mensaje de esperanza, pues hay una juventud que lleva adentro el sagrado fuego de la continuidad del pueblo judío y es a ellos a los que va dirigido este libro, a homenajear la memoria de Gabriel y Rivki Holtzberg z’l, y que sirva de ejemplo para otros jóvenes que pertenecen al pueblo judío. Es nuestra obligación acercarlos”.

Por su parte, Guillermo Borger, presidente de la AMIA, expresó: “Estamos en esta mesa, en la que se realizan nuestros debates, que es una mesa de entendimiento y discusiones a veces, y de paradojas como siento en este momento, y no puedo abstraerme de algunos sucesos importantes que vivió la comunidad y la sociedad toda. No me puedo olvidar de que hace pocos días estábamos escuchando que la Argentina, el país democrático, amante de la democracia, celebraba nada menos que un acuerdo con la república teocrática de Irán y esto es ya una ley. Esto realmente me produce mucho dolor”. 

“Han visto nuestro protagonismo defendiendo a la comunidad judía y sabiendo la necesidad de justicia en esta casa en la que cayeron 85 personas. Y esta es la paradoja, pues el libro también habla de lo que es no respetar al ser humano, pero también hay algunas alegrías que también compartimos aquí. Por ejemplo, acá hace unos meses estuvo el cardenal Bergoglio, elegido Papa Francisco, comiendo con nosotros comida kosher”, destacó. Luego leyó la carta que la AMIA le envió al Papa Francisco.

Borger continuó diciendo que si bien todavía no había leído el libro, compartió “las emociones de estar en India por un tema comercial de la empresa de ambos y encontrar esa calidad humana de Gabriel y Rivki Holtzberg z’l”.

“Con ellos compartimos Rosh Hashana y Iom Kipur, y a los pocos días fueron asesinados por el sólo hecho de haber sido judíos, shlujim de Jabad que ayudaban a la gente para que pueda estar agradablemente durante su paso, por cualquier motivo, en una ciudad como Bombay, en la India. Me alegra que mi señora haya tenido la valentía y la voluntad de escribir un libro para compartirlo hoy con ustedes en esta mesa en la que compartimos sensaciones y emociones”, agregó.

Finalmente la autora, Ite Klimovsky de Borger, agradeció a todos los que la estaban acompañando: a la AMIA y su Departamento de Cultura; a la Editorial Lumen, editora del libro; a quien logró componer la tapa del libro; a su nuera Daniela; a Moshé Korin, por haberla convencido de culminar y publicar el libro; y al rabino Grunblatt, por acompañarla personalmente a la Editorial Lumen y que sea distribuido en las mejores librerías de Buenos Aires.

Luego proyectó diversas fotografía tomadas tanto en el Beit Jabad y otros lugares de Bombay que visitaron, como cuando estuvieron en la casa de la familia Holtzberg en Israel, y finalmente una del Ohel del Rebe de Lubavitch en Nueva York donde, en medio de una gran cantidad de escritos, se observa una fotografía de Gabriel y Rivki Holtzberg z’l. Esta imagen fue explicada por Guillermo Borger, quien dijo que cada vez que visitan Nueva York van a la tumba del Rebe y que cuando lo hicieron por primera vez luego del atentado, una fuerte brisa movió los papeles que rodean la tumba y entre ellos surgió la fotografía de Gabriel y Rivki Holtzberg z’l, lo que los emocionó de sobremanera.