Itongadol.- El jefe del espionaje israelí ha abandonado Doha, pero las conversaciones sobre un alto el fuego en Gaza y la liberación de rehenes continúan en la capital qatarí, según un alto funcionario qatarí.
El jefe del Mossad, David Barnea, «ha abandonado Doha», declaró el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores qatarí, Majed al-Ansari, en una sesión informativa periódica, añadiendo que «los equipos técnicos se están reuniendo mientras hablamos.»
Un funcionario de la Oficina del Primer Ministro confirma más tarde la marcha de Barnea, añadiendo que «los equipos de trabajo de alto nivel permanecen en Qatar para continuar las conversaciones y negociaciones.»
La partida era esperada. Un alto funcionario israelí citado por medios de comunicación hebreos dijo el lunes que Barnea iba a celebrar reuniones hasta bien entrada la noche y que probablemente regresaría a Israel el martes, mientras que un equipo negociador formado por funcionarios de los servicios de inteligencia permanece en la capital qatarí para continuar las conversaciones.
Un funcionario israelí estimó que las negociaciones en Doha podrían durar al menos dos semanas, citando las dificultades que podrían tener los delegados extranjeros de Hamás para comunicarse con los líderes terroristas en Gaza.
Las conversaciones estaban en suspenso desde la semana pasada, cuando Israel rechazó la respuesta de Hamás a su última oferta de una tregua de seis semanas en la que se liberarían 40 rehenes, con la posibilidad de fases posteriores para prolongar la pausa en los combates y permitir la liberación de más rehenes. Al parecer, el grupo terrorista busca un acuerdo para la liberación de cientos de prisioneros palestinos de alto nivel y el compromiso israelí de poner fin a los combates de forma permanente y retirar las tropas de Gaza, permitiendo a los residentes del norte de Gaza regresar a sus hogares.
Israel ha descartado categóricamente un alto el fuego permanente e insiste en que reanudará su objetivo declarado de destruir a Hamás una vez que se lleve a cabo cualquier acuerdo para la destrucción de los rehenes.