Itongadol.- Un gol con estilo brasileño definió un partido emocionante de los cuartos de final de la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA Argentina 2023. Fue la quintaesencia del fútbol-arte, algo digno de la historia cósmica de dioses de la emoción como Garrincha, Pelé, Zico, Ronaldo, Ronaldinho y Neymar.
Sin embargo, no fue anotado por un brasileño. Para desgracia de los creadores del «jogo bonito», se marcó contra Brasil. El protagonista de la epopeya fue un hombre nacido a 10.000 kilómetros de las gloriosas playas de Copacabana e Ipanema, en las colinas de arena de Ashdod, una ciudad ubicada a 60 kilómetros de Jerusalem.
Parecía no haber peligro cuando la pelota le cayó a Dor Turgeman, a la derecha del área brasileña, a segundos de que finalice el primer tiempo de la prórroga. A pesar de todo, el joven israelí de 19 años se abrió paso y remató antes de que pudieran detenerlo.
El pequeño Israel, que llegó al mundial sin haber ganado nunca un partido en un torneo oficial de la FIFA, protagonizó una de las mayores sorpresas en los 46 años de historia de la competición.
El seleccionado israelí festeja el triunfo (FIFA).
«Cuando era niño, solía jugar mucho en el barrio, fuera de mi casa. Siempre intentaba hacer cosas así, por lo que creo que el gol vino de ahí. Estoy muy emocionado y orgulloso», expresó Turgeman a la FIFA tras el partido, disputado en el Estadio San Juan del Bicentenario.
El héroe de la jornada agregó que estaba »muy emocionado y muy contento de haber hecho felices a todos los israelíes. Esto es enorme para mi país. Es increíble».
Tay Abed, uno de sus compañeros, lo definió como un »gol increíble, al estilo brasileño».
»Eso es lo que puede hacer Dor Turgeman. Es un jugador fantástico. Es uno de los mejores jugadores de este torneo», añadió Abed.
Israel 3 Brasil 2 #sub20
Electrizante final pic.twitter.com/RsaNZyoBfj— Agencia AJN (@AgenciaAJN) June 3, 2023
La lógica indicaba que el torneo se terminaría para Israel en San Juan. Esa opinión era unánime entre los que no formaban parte del plantel de Ofir Haim, el director técnico israelí.
Abed admitió que sabían »que nadie nos daba una oportunidad, pero creíamos en nosotros mismos. Brasil es un equipo fantástico, uno de los mejores de este torneo. Pero salimos a jugar con el corazón, a jugar con pasión».
Con respecto al triunfo, Abed señaló que »es el mejor partido que jugamos en el torneo. Es algo histórico para mi país. La sensación es irreal. Estamos muy emocionados por haber ganado este partido».
Tay Abed, durante el partido. (FIFA)
«Hay muchos fanáticos del fútbol en Israel. Es el deporte más famoso y todo el país vio el partido. Estamos muy orgullosos de haber conseguido la victoria para todo el país», afirmó Abed.
El próximo rival de Israel será el ganador del partido entre Estados Unidos y Uruguay. La semifinal se disputará el próximo jueves en La Plata.
Finalmente, a la hora de hablar de sus posibilidades de campeonar, Abed concluyó: «Vamos paso a paso. Llegamos a semifinales y si seguimos jugando así, con la pasión y el corazón, podemos lograrlo».