Itongadol.- El primer ministro Naftali Bennett rechazó a los Estados Unidos por su condena de la política de Israel de demoler las casas de los palestinos acusados o condenados por ataques terroristas que cobran vidas.
«El Primer Ministro aprecia y respeta a Estados Unidos», dijo su oficina.
«Al mismo tiempo, el Estado de Israel actúa únicamente de acuerdo con las consideraciones de seguridad y la necesidad de proteger las vidas de los ciudadanos israelíes», declaró la oficina de Bennett.
Habló apenas unas horas después de que la embajada de Estados Unidos en Jerusalén criticara el hecho de que las FDI arrasaran la casa de la familia de Muntasir Shalabi en Cisjordania la madrugada del jueves. Shalabi ha sido acusado formalmente de matar a Yehuda Guetta , de 19 años, en un tiroteo desde un vehículo en el cruce de Tapuach a principios de mayo.
«La casa de toda una familia no debe ser demolida por las acciones de una sola persona», dijo el jueves el portavoz de la embajada.
«Creemos que es fundamental que todas las partes se abstengan de dar pasos unilaterales que exacerben las tensiones y socaven los esfuerzos para avanzar en una solución negociada de dos estados; esto ciertamente incluye la demolición punitiva de viviendas palestinas», agregó el portavoz.
El intercambio de Bennett con Estados Unidos es su punto de discordia más serio desde que su gobierno asumió el cargo el mes pasado. Se produce cuando Bennett se está preparando para su primera visita a la Casa Blanca este verano.
Shalabi tiene la ciudadanía estadounidense, al igual que su esposa y sus siete hijos, tres de los cuales viven en la casa y cuatro en Estados Unidos.
El jueves por la mañana temprano, las FDI informaron que habían demolido la casa ubicada en Turrmus Aiya, cerca de Ramallah.
El Tribunal Superior de Justicia había rechazado una petición contra la demolición, así como una apelación posterior, presentada por la ONG de izquierda HaMoked. Había argumentado que la estructura no era el hogar principal de Shalabi, sino más bien el de su esposa separada de quien se separó hace años.
«Este era el único hogar de una mujer que se había separado efectivamente del sospechoso hace años, mientras él vivía la mayor parte del tiempo con sus otras esposas e hijos en casas que tenía en Estados Unidos», dijo HaMoked. «Por lo tanto, el sospechoso no tenía ‘vínculos residenciales’ significativos con la casa».
La ONG también argumentó que Shalabi padecía una enfermedad mental y había «declarado repetidamente que estaba motivado por pensamientos suicidas».
Shalabi fue acusado en junio de los cargos de asesinato de Guetta, así como del intento de asesinato de dos estudiantes, también heridos en el tiroteo.
Otros cinco palestinos también fueron acusados de obstrucción de la justicia porque proporcionaron a Shalabi un escondite durante la persecución inicial.