Itongadol.- Más de cien mil partidarios de KKL Francia se embarcaron en una gira solidaria a la frontera de Gaza, para contrarrestar los globos incendiarios y el terrorismo de cometas.
Los participantes eran inmigrantes franceses recién llegados a Israel y visitantes por las vacaciones de verano en Francia. Muchos dijeron que llegaron porque querían ver los efectos de este nuevo tipo de violencia con sus propios ojos.
El martes 7 de agosto, la visita comenzó en el Centro Educativo Beit Nahmias en la guardería KKL en Gilat. Para reunirse con el grupo estaba el director Regional de KKL en el oeste del Nuégev, Danny Ben-David, quien es el responsable de todas las actividades de KKL en esa área, incluida la prevención de incendios. Les dijo lo difícil que es para él ver los bosques y los campos agrícolas en llamas.
"Hasta la fecha, más de 860 acres de bosques maduros han sido destruidos por incendios premeditados y eso no incluye las grandes extensiones de arbustos naturales, reservas naturales y campos agrícolas que se incendiaron. En total, casi 10.000 acres han sido quemados en menos de cuatro meses. Desde el comienzo de abril, cuando comenzó el terrorismo por las cometas, nuestra carga de trabajo diario ha aumentado dramáticamente porque, junto con nuestro cronograma habitual, hemos tenido que reforzar nuestras capacidades de lucha contra incendios. Los incendios están causando millones de shekels de daño y están afectando la calidad de vida en la región".
En el Kibutz Nahal Oz, que está situado justo en la frontera con Gaza, la delegación se encontró con el miembro fundador del Kibutz, de 84 años, Yankele Cohen, quien les contó cómo la vida en la zona ha cambiado desde que llegó en 1953.
"En los primeros días, la seguridad era mucho más un problema para nosotros de lo que es hoy. Comenzamos sin nada y nos convertimos en una comunidad fuerte y vibrante que crece constantemente. La gente quiere vivir aquí. Actualmente hay más familias en la lista de espera que hogares para albergarlas. El nuevo fenómeno de las cometas ardientes no nos detendrá", expresó.
El veterano miembro del kibutz llevó a sus invitados a un sitio de construcción donde se está realizando un nuevo centro de visitantes dentro del antiguo comedor de la comunidad. Dijo que a lo largo de los años KKL ha sido solidario y generoso. "Puedo mencionar toda una serie de proyectos, como los árboles de seguridad que esconden el kibutz de los ojos del lado de Gaza. Ahora espero que la organización nos ayude a recaudar dinero para completar este esfuerzo de construcción".