Itongadol/AJN.-Después de una intensa reunión de gabinete en la que el Primer Ministro israelí envíó una clara advertencia a ministro de Transporte, Israel Katz, altos funcionarios del Likud aseguraron que a la consideración de Netanyahu de despedirlo ya no es una opción, a fin de evitar convertirlo en un héroe público que expresó su enojo por la situación caótica de transporte público.
La noche del sábado, la perspectiva de Katz convertirse en la próxima víctima de la lista negra política de Netanyahu era una posibilidad seria. Sin embargo, después de una reunión de gabinete extremadamente tensa, en la que los dos no intercambiaron una sola palabra y Netanyahu marcó una clara amenaza contra Katz, la opción parece haber sido tachada.
La tensión viene de la mano de la disputa Shabat-tren, que continuó dominando los titulares y el programa político desde la semana pasada.
Katz se convirtió en una fuente de irritación para Netanyahu cuando los dos afirmaron públicamente su posición sobre el tema. Antes de la reunión, Katz se negó a comentar sobre el asunto durante una reunión con ministros del Likud. Netanyahu, sin embargo, no permaneció en silencio: "No voy a dejar que nadie lance un golpe de estado contra mí", aclaró a principios de la mañana del domingo.
Durante su discurso de apertura del gabinete, el primer ministro no perdió el tiempo para abordar la cuestión. "Esta crisis es completamente innecesaria; no había necesidad de llegar a esto. Ha habido un status quo en Israel durante muchos años. Cuando es necesario hacer un trabajo en shabat, se hace, tal como sucedió el pasado sábado en la autopista Ayalon," aseguró Netanyahu.