AJN.-VER VIDEO CLIC AQUI. El presidente de la AMIA, Guillermo Borger, aseguró ayer, viernes, en diálogo con la Agencia Judía de Noticias, que “el encuentro del ministro (de Relaciones Exteriores, Héctor) Timerman en la DAIA cuestiona que posiblemente alguien no tenga presente que la AMIA es víctima directa y querellante”. También se refirió a la relación con el gobierno, las elecciones en la institución y su reciente viaje a los Estados Unidos, Bélgica e Israel. Borger realizó estas declaraciones en su primer día de trabajo luego de una importante gira por los tres países.
El presidente de la AMIA, Guillermo Borger, aseguró ayer, viernes, en diálogo con la Agencia Judía de Noticias, que “el encuentro del ministro (de Relaciones Exteriores, Héctor) Timerman en la DAIA cuestiona que posiblemente alguien no tenga presente que la AMIA es víctima directa -murieron empleados y socios- y querellante”. Borger realizó estas declaraciones en su primer día de trabajo luego de un importante viaje de treinta días por EE.UU. Bélgica e Israel.
“La AMIA no participó del encuentro porque no fue convocada en forma adecuada y esperamos que de la misma manera que el canciller participó de un encuentro en la DAIA, lo antes posible podamos tener un acercamiento a esta charla que están teniendo con Irán”, reclamó.
“Estamos absolutamente confiados en el importante trabajo que viene llevando a cabo la Justicia argentina y el fiscal de la causa, Alberto Nisman”, pero “entendemos que se nos debe una explicación y que debemos participar, aunque el diálogo mantenga el secreto entre los Estados”, insistió el líder comunitario.
“Para que estas 85 víctimas fatales puedan algún día descansar en paz, a pesar de los 18 años transcurridos sin detenidos, tenemos la obligación de saber qué es lo que está pasando y si este diálogo está avanzando”, reiteró.
Ante “una mesa de diálogo con un interlocutor como Irán, ofrecida por su gobierno a la Argentina, decimos: ¡ojo que no es un país confiable! Recordamos que es un país teocrático, fundamentalista, negador de la principal tragedia que sufriera la humanidad toda, la Shoá. En mi caso esto es doblemente sensible, ya que mi mamá, con 87 años y su número de campo de concentración estampado en su brazo, es un testigo viviente para grupos latinoamericanos en el Museo de la Shoá. Nadie me puede venir a decir que la Shoá no existió. Y de la misma manera, entendemos que si un presidente puede decir ante las Naciones Unidas que la única democracia que tenemos en Medio Oriente, que es el Estado de Israel, debe desaparecer del mapa, no debería ser interlocutor de un país democrático como la Argentina.
Los ciudadanos iraníes sospechados de semejante crimen, en el que murieron 85 personas, no sólo que jamás se han presentado a hacer su descargo y demostrar su inocencia, sino que elevan al rango de ministro a uno de los principales implicados, con lo cual logra inmunidad diplomática y aparece paseando, en forma oficial, por un país amigo, hermano y vecino como es la República de Bolivia. Todo nos genera un malestar, y en un momento donde el mundo democrático -Canadá, Estados Unidos y la mayoría de los países europeos- le cierran las puertas a un país como Irán, sabiendo del peligro de su pretensión de armamento nuclear en su quehacer de matar gente, hoy encuentran una mesa amistosa aquí, con 85 muertos que aún no descansan en paz. Esto lo llevamos a todos los ámbitos internacionales”, sintetizó Borger.
Respecto del gobierno, el presidente de la AMIA aseguró que “la relación, como siempre, es absolutamente respetuosa. Seguimos trabajando en para ayudar juntos a la gente, con importantes articulaciones en todo lo que es acción social tanto para los menores como para los mayores. Con la Red de Empleo, que constantemente replica el Ministerio de Trabajo, también es una relación sumamente positiva. Ojalá que este 2013 traiga un compromiso de trabajar nuevamente en armonía y esclarecer lo más que se pueda la causa que más afecta al país, que es el atentado a la AMIA, aún no resuelto tras 18 años. Debemos reconocer que este gobierno fue el que más impulsó la ‘causa AMIA’, pero necesitamos saber qué está sucediendo detrás del diálogo con Irán”.
Elecciones AMIA.
Por otra parte, Borger, representante del Bloque Unido Religioso, se refirió a su sucesión: “Es la primera vez en más de 115 años de existencia de la AMIA que una Comisión Directiva que asume por tres años está transitando su quinto año y ojalá que todo el trabajo que venimos haciendo, con mucho esfuerzo y participación, trascienda a la próxima Comisión Directiva y que, de una vez por todas, a partir del 7 de abril, cuando serán las nuevas elecciones, haya un acuerdo político para que todo este trabajo, al cual hemos volcado el mayor de los esfuerzos para la continuidad judía, con el compromiso de jamás bajar los brazos hasta llevar adelante el esclarecimiento de semejante atentado, de continuar con la excelencia que debe tener un rabinato para la solución de los problemas familiares, el mejoramiento de la educación en las casi 50 escuelas que participan del Vaad Hajinuj, nuestra importante Red de Empleo, que se va incrementando, que hemos tenido la suerte de exportarla al Estado de Israel y tenemos acuerdos con 13 provincias para replicar el modelo”.
“No me gusta el término ‘ortodoxia’. Creo que todos somos judíos que queremos la continuidad y lo mejor para nuestro pueblo, especialmente para la comunidad judía local. Entendemos que quienes pretendan la conducción de la AMIA deben tener el corazón, el espíritu y la mente dedicada al fortalecimiento del pueblo judío, en general, y de la comunidad judeoargentina, en especial, tratando el mejor acercamiento a las comunidades judías del interior del país y trabajando en conjunto todas las instituciones centrales para un fortalecimiento. Quien quiera ver una polarización, que la llame como la llame. Creo que es un camino equivocado. Debemos trabajar por el hemshej, la continuidad del judaísmo, y esto es sólo a través de la educación judía. Judío es quien quiere trabajar por la continuidad y la continuidad se logra solamente estudiando qué es el judaísmo. Debemos aprender para brindar esa continuidad a través de nuestros educandos, de nuestra Kehila, de nuestras escuelas, de nuestra ayuda al prójimo, con el ejemplo que siempre tuvo el judaísmo para la sociedad toda”, agregó.
El viaje
En otro sentido, el líder comunitario resumió a AJN su “viaje extenso, enriquecedor y sumamente exitoso, con la responsabilidad de llevar el accionar de la AMIA a todos los ámbitos internacionales porque somos un ejemplo de comunidad para el mundo y para articular con las comunidades judías de Iberoamérica en distintos encuentros”.
“Comenzamos con un viaje a Miami, Estados Unidos, donde al menos una vez por año nos encontramos los máximos dirigentes de las comunidades judías, que tenemos muchos temas en común. Nos reunimos con argentinos que viven en Miami, preocupados por todo este tema, con quienes intercambiamos opiniones. El terrorismo internacional de la mano de Irán suele liderar las preocupaciones, y desde la AMIA, como lamentables pioneros en este proceso hace 18 años, con el peor atentado que sufriera la Argentina, por supuesto que tenemos mucho que reclamar y decir lo bien que hace tener memoria para poder hacer justicia”, contó.
“Hoy el mundo en general está complicado, pero tenemos muchas fortalezas y principalmente nos gusta tratar las cosas positivas que hace la AMIA, que es dar trabajo y educación y ayudar a la tercera edad”, sintetizó Borger.
“Luego, otro ámbito internacional sumamente relevante: un encuentro en Lieja, Bélgica, de la International Task Force, que es una alianza de más de 30 países creada para el estudio de la Shoá, que tanto mal le hizo al mundo, para que la gente sepa qué fue y para que nunca se repita. Realmente me enorgullece, como presidente de la AMIA, que la Argentina sea el único país de Latinoamérica, con una amplia representación de los ministerios de Justicia y Educación y de la Cancillería, a cuya delegación acompañó la AMIA como una ONG importante, invitada por la Argentina. También fue sumamente relevante compartir la mesa y dialogar con el jefe de la delegación, el director general de Derechos Humanos de la Cancillería, Federico Villegas Beltran; la directora de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de Derecho Humanos, Andrea Gualde; y la subsecretaria de Equidad y Calidad Educativa del Ministerio de Educación, María Celeste Adamoli. El presidente de la AMIA acompañó ese trabajo por la educación en el mundo, dando el ejemplo desde nuestro Vaad Hajinuj -Consejo Central de Educación-, acompañado por su directora, Batia Nemirovsky, de cómo debe ser el estudio de la Shoá a nivel curricular”, prosiguió.
“Me tocó también estar en el Estado de Israel, con el director general para Latinoamérica del Ministerio de Relaciones Exteriores, Itzhak Shoham, siempre preocupado por como continúan las causas AMIA y Embajada y por esta mesa de diálogo entre Irán y Argentina. Si bien es nuestra pretensión que pueda tener algún avance positivo, entendemos que es muy difícil sabiendo que el interlocutor es Irán. Hemos hablado en distintos ámbitos, con vínculos de amistad de muchos años. Hemos compartido un panel de reflexión con el anterior embajador del Estado de Israel, el amigo Daniel Gazit, en la OLEI, un importante organismo para ayudar a los inmigrantes latinoamericanos, con un gran auditorio colmado por argentinos que están viviendo en Israel, donde uno de los principales temas fue las relaciones del Gobierno con la AMIA y la preocupación por la mesa entre Irán y Argentina. Tratamos de esclarecer lo máximo posible, con el ex embajador Gazit también exponiendo su preocupación”, finalizó el presidente de la AMIA.