El primer ministro de Israel Benjamin Netanyahu perdió la compostura hoy lunes durante una reunión con una facción del partido Likud luego de que los líderes de la comunidad de Judea y Samaria se quejaran por la continuación de la política de restricción de la construcción en los asentamientos judíos.
"La gente no entiende la realidad que estamos viviendo", protestó Netanyahu, quien advirtió que cualquier declaración a favor de nuevas construcciones puede afectar a las existentes.
"Si usted no vive en este mundo puede pasar por alto todo, y le sugiero que tenga cuidado en proteger la construcción existente, porque eso es lo que está en el orden del día – no la nueva construcción", apuntó el Primer Ministro durante la reunión, a la que asistieron los alcaldes de Ma’ale Adumim, Benny Kasriel, y de Gush Etzion, Shaul Goldstein, los jefes del Consejo, Beit Arye, de Avi Naim y el líder del Consejo Regional del Valle del Jordán, David Elahiani.
Netanyahu aseguró: "Todos queremos el apoyo a los asentamientos".
De acuerdo a lo consignado por el portal de noticias Ynet, Netanyahu apuntó que hace solo unas semanas se produjo el veto de Estados Unidos que condenaba a Israel por los asentamientos. “Debemos tener en cuenta la realidad que estamos viviendo y que las cosas están cambiando en el Oriente Medio”, agregó.
"Podemos golpearnos la cabeza contra la pared, pero eso no es lo que estoy haciendo. No es la construcción en Judea y Samaria. Es cierto que no hay ofertas en varios lugares, y esto está siendo estudiado. En estos momentos estamos haciendo esfuerzos para mantener la construcción existente”, garantizó.
Netanyahu apuntó que Israel “está viviendo en una realidad internacional muy difícil”, y señaló que “incluso el veto estadounidense en el Consejo de Seguridad se logró después de grandes esfuerzos”.
“Podemos ignorar todo y decir que no hay problema, pero como un primer ministro responsable de este país, la responsabilidad general es mía", concluyó Netanyahu.
GB
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