«Ciertamente aquellos que perpetran terrorismo, preparan una bomba que sabemos que se disponen a colocar en alguna parte tienen que ser puestos en el punto de mira, pero Yassin no era una ‘bomba marcada'», declaró Poraz a la radio israelí. «Me temo que hemos abierto un ciclo y que muchos pagarán por ello con sus vidas», añadió.
«Temo que la motivación de Hamás aumentará y que Yassin se convertirá en una especie de mártir… un héroe nacional para ellos y siento mucho decirlo, esto no evitará que Hamás siga adelante con sus actividades», añadió, subrayando que «cada líder puede ser reemplazado».
En su opinión, no es muy sabio atacar a un religioso musulmán, incluso aunque éste «esté implicado en actividades terroristas» ya que, destacó, «el resultado puede ser muy peligroso».
Por su parte, el líder del partido de izquierda Yahad, el ex ministro de Justicia Yossi Beilin, también criticó el asesinato de Yassin, preguntándose «¿cuántos israelíes tendrá que pagar con sus vidas por este acto?». La muerte del líder espiritual de Hamás «fue un error horrible que tendrá un fuerte coste para Israel», advirtió, subrayando que provocará un nuevo ciclo de violencia en la región.
Fte E.Press