Los testigos en Gaza agregaron que el helicóptero disparó tres misiles al edificio y al menos cuatro personas resultaron heridas. Fuentes de seguridad palestinas dijeron que aparentemente la casa pertenecía a una familia vinculada con un grupo radical.
Soldados israelíes montaron ametralladoras en sus tanques y prepararon transportes blindados de efectivos cerca de un punto de acceso a Gaza, a unos 25 kilómetros al sur de Ashdod, el segundo mayor puerto de Israel y un sitio estratégico donde los atacantes mataron a 10 personas el domingo.
El atentado dio un nuevo golpe a la sensación de seguridad de Israel, porque los atacantes palestinos pudieron sortear las cercas de la Franja de Gaza por primera vez en más de tres años de conflicto.
Sharon juró que no dará cuartel a los extremistas. Tras el ataque, canceló las conversaciones de paz con los palestinos y prometió seguir con sus decisiones unilaterales que los privaría de parte de la tierra que piden para la creación de un Estado.
«Las autoridades de defensa tomaron decisiones sobre varios modos de acción contra las organizaciones terroristas», dijo un breve comunicado de la oficina de Sharon, después de una reunión de los principales ministros de su Gabinete de Seguridad.
Una fuente de seguridad dijo que se habían acordado importantes incursiones en Gaza para «destruir la infraestructura de los grupos terroristas» y matar líderes de facciones como Hamas y las Brigadas Mártires de Al-Aqsa, responsables del ataque del domingo.
Fte E.Press