El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, minimizó hoy el renovado furor sobre los asentamientos de Cisjordania y llamó de “exagerada” la reacción internacional al último plan de construcciones de Israel.
Según Netanyahu, el enojo de ayer acerca de los 1.000 nuevos hogares en los asentamientos de Har Homa más allá de la Línea Verde en Jerusalem del Este están fuera de lugar. El comentario lo expresó en una entrevista con la cadena Fox.
“Creo que está sobredimensionado. Estamos hablando de unos departamentos que realmente no afectan el mapa de paz, contrario a todas las impresiones que pueden ser percibidas de nuevos informes. Entonces, es un tema menor que se convirtió en algo mayor. Creo que está mal”, dijo.
Netanyahu dijo que la tensión sobre los asentamientos está alejando la atención de temas importantes. Además dijo que a pesar de las construcciones de Jerusalem del Este, la cual los palestinos reclaman como su futura capital, se podría llegar a un acuerdo si ambos lados lo quisiesen.
“Los lados menores se dejan de lado y se habla de los mayores temas, y se trata de llegar a un acuerdo de paz. Si hay un pacto por hacer, se verá en un año. Si no lo hay, entonces no tendremos éxito”, aseguró.
Los comentarios de Netanyahu se hicieron luego de los entredichos entre Israel y EE.UU., en los que la oficina del primer ministro dio a conocer una declaración en la que negaba cualquier conexión entre las construcciones judías en el tradicional este árabe y la falta de progreso en las charlas con los palestinos.
“Jerusalem no es un asentamiento”, decía la declaración.
EE.UU., que está mediando las negociaciones de paz, le pidió repetidas veces a Israel que congele las construcciones que pasan la Línea Verde, incluyendo el Este de Jerusalem, el cual el Estado Judío se anexó en 1980, un movimiento que nunca fue reconocido internacionalmente.
“Claramente hay una conexión entre los asentamientos y el diálogo. La sugerencia de este tipo de anuncio no tendrá un efecto en el lado palestino y creo que es incorrecto”, expresó un vocero de EE.UU. en respuesta a las declaraciones de Netanyahu.
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